My Doll - DaeJae

C r e a d o r

Young no sabe en donde está.
Por primera vez se da cuenta que lo miran, no quiere que lo vean como si fuera una cosa extraña.
Agacha la cabeza para evitar el contacto visual.

Choca con una señora.
— Fíjate, estorbo.

Continúa.
Se atraviesa la avenida, la bocina de un auto aproximándose a su cuerpo lo hacen detenerse y caer al suelo.

El conductor sale del auto bastante molesto.
— ¡¿Estás loco?!, ¡¿Quieres morir?!. Vamos idiota, quítate del camino o te atropellaran.

Se levanta y se va corriendo.

Está perdido, no sabe cómo regresar a casa.
No recuerda el camino y las personas son malas.

Se queda en el callejón que se forma entre un edifico y otro.
Se sienta en el suelo, rodea sus piernas con los brazos y agacha la cabeza.
Suelta lágrimas porque está asustado, quiere ver a DaeHyun quiere ir con él, tiene mucho miedo, extraña la casa.
Antes ya había salido pero es la primera vez que presta atención a todo su entorno; desde autos, casas y personas con miradas frías.

— ¿Disculpa?

Levanta la cabeza al escuchar esa hermosa voz.
Al verla siente una tranquilidad inmensa.

— ¿Eres Young cierto?

— Si...

— Espero me recuerdes, soy la chica del parque — le sonríe y se agacha —. ¿Qué tienes?

— Me perdí.

Ella desconoce si el chico padece algo pero le causa tanta ternura.
— ¿No sabes en dónde está tu casa?

— Con DaeHyun.

— Pero la dirección.

— ¿Qué es eso?

— Necesitas la dirección para llegar a tu casa, o alguna referencia, mmm, ¿Qué hay cerca?

— Hay árboles y un faro.

Su información no es de mucha ayuda para ella.

— ¿Tienes familiares?

— DaeHyun.

— ¿DaeHyun? ¿Cuál es su apellido?

— ¿Apellido? — Intenta recordar.

— Mmm, el único DaeHyun que me viene a la mente es DaeHyun Reiz.

Young sonríe.— ¡Sí!

— Oh, vaya, es hijo de Kleit — se levanta —. Entonces te puedo ayudar.

Extiende su mano para que la tome.
Young se pone de pie.

— Sigueme.

El miedo se ha ido.
Ya no le importa si las personas son malas porque estando con ella está protegido.

Caminan y caminan hasta llegar a un lugar de paredes enormes.
Se paran frente a una puerta.

— Aquí es la fábrica del señor Reiz, es sábado pero trabajan medio día, diles que eres amigo cercano de su hijo y espera adentro — peina los mechones de la frente —, seguro marcan a la casa de DaeHyun y él vendrá por ti — también le acomoda un poco la ropa.

Young se apena.
— Sí...

Ella le sonríe dulcemente.
— Nos vemos.

— Gracias...

— De nada — da el primer paso para alejarse.

— Tendrás un bebé, ¿Verdad?

Ella se detiene y lo mira con un rostro confuso ya que en ningún momento han sacado el tema o le ha enseñado los estudios que trae en su bolso.