F a r o

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Young ya no tiene miedo y las lágrimas no salen más.

— Mmm — el chico busca en el interior de las bolsas que trae — ¿Quieres un jugo? — se lo ofrece —, es de fresa.

Young lo acepta con timidez. Mira el suelo y sonríe.
— Extrañaba tu voz — dice en un tono muy bajo, casi solo para él.— Gracias.

— De nada, quisiera ofrecerte de otro sabor pero todos son de fresa porque a mi esposa se le antojó este.

— ¿Qué es esposa?

Le parece algo extraño que no lo sepa pero le da ternura, no lo juzga y solo se dedica a responder.

— La mujer con quien contraes matrimonio, es esa persona a la que eliges para compartir tu vida.

Young sonríe sobre labios y se rubora, pues él quiere compartir la vida con DaeHyun.

— Y bien, ¿Me dirás por qué estás sentado en la banqueta de una avenida?

— Estoy perdido.

— ¿No sabes cómo regresar a tu casa?

— No, pero tengo esto — le muestra el gafete.— Tiene la dirección de casa.

El chico revisa el gafete.

— No está muy lejos, solo pide que un taxi te lleve.

— ¿Pero cuál es el taxi?, DaeHyun no me dijo — de nuevo se torna triste —. No sé cuál es.

Se levanta.
— Nada de llorar, arriba.

Le hace caso.

— Sigueme, por aquí casi no pasan taxis.

Va detras de él como un patito hasta que llegan a otra avenida.

— Los amarillos son taxis, estira tu mano cuando veas pasar a uno y se detendrá.

Young lo intenta pero ninguno se detiene.

— Sin timidez, hazlo con seguridad, ahí viene uno.

Siente como si lo estuviese regañando pero a la vez enseñando algo bueno.

Un taxi se detiene.

Young sonríe contento luego de haberlo conseguido.

El chico se acerca a la ventanilla para hablar con el conductor.

— Listo, enseñale el gafete y él te llevará.

— Sí.

— Espera — saca su cartera —, te daré dinero.

— Yo tengo — muestra la pequeña bolsa que trae colgada.

— ¿De verdad?— saca un billete y lo mete en uno de los bolsillos del pantalón —, por si no te alcanza con lo que traes.

— Gracias.

— Vale, entonces cuídate mucho em... ¿Cuál es tu nombre?

— Young.

Sonríe y le pone una mano en el hombro.
— Cuídate, Young.

— Sip... Cuídate y cuidalos— se mete al taxi.

Él, por alguna razón no quiere que algo malo le pase a ese chico que acaba de conocer. Espera que llegue bien a casa.

Young tiene miedo, pero debe confiar en que sí lo llevarán a casa y no con Jackson.

El taxi se detiene.
— Es aquí, no puedo entrar más allá porque a partir de estos árboles es propiedad privada.

— Sí...

My Doll - DaeJaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora