Cupid's Chokehold

El "Joder las Cosas" es el Mejor Amigo de los Pandilleros

Taehyung trató al siguiente día de hablar con RM; odiaba dejar las cosas sin arreglar, pero RM aparentemente no sentía de  la misma manera. Fue elusivo, e incluso su gente genuinamente parecía no saber nada; Taehyung podía entender eso, mantenerlo todo para si mismo. Jimin estaba perfectamente contento con lo que sucedía, y hasta parecía que saltaba cuando caminaba sin la preocupación de Taehyung sobre sus hombros, o el tener que cruzarse con el otro adolescente.

Para el viernes, Taehyung estaba preocupado, paranoico por la ausencia de RM. Iba a la escuela la mayoría de los días, un buen rato, pero evadía a Taehyung meticulosamente, y la tarea era más fácil porque no compartían clases. En su último intento por contactar con él, Taehyung se acercó a la pandilla en el almuerzo, sus manos bien metidas en sus bolsillos, las cejas  un poco juntas.

Sentado al frente de las gradas, escuchando a su gente, estaba  el ahora familiar rostro de quien Taehyung llegó a reconocer como el segundo al mando de RM, Jin. Cuando se dio cuenta que Taehyung se acercaba, Jin le miró con simpatía, su rostro arrugándose y sus ojos rasgándose.

—Ey – le saludó —¿aún sin suerte?–
La quijada de Taehyung se aflojó — supongo que tienes la misma suerte.

Jin pareció considerarlo un poco, pensativo, y entonces se giró para golpear a otro en la rodilla — Ey, me voy. Hasta más tarde. — Saltó de su asiento sobre la mesa. Elevó su barbilla, metió sus manos en los bolsillos de su chaqueta. —Anda, vamos a fumar.

— Todos en esta escuela van a tener cáncer en la graduación – Gruñó pero aún así caminó junto a Jin.

—Todos los de  nuestra pandilla probablemente no sean invitados.
Taehyung gruñó de nuevo, y se formó un silencio confortable mientras caminaba hacia la parte trasera de la escuela.

— Tengo de conocer a RM ya un tiempo – Jin comenzó, apropósito de nada —Es un chico difícil de conocer.

—Puedo simpatizar con eso – Taehyung le hizo saber, pensando en Jimin.

— Algunas veces es difícil entender sus reacciones a algunas cosas, porque no quiere que lo entiendas. Se ha metido en la cabeza que entre menos revele, más seguro está. – Kay continuó —Y es verdad, y quiero decir, con el tipo de vida en que estamos metidos, es bueno aparentar como si uno no tuviera debilidad. Pero no es el algo que se pueda apagar, u olvidarse.

Taehyung frunció el ceño pero dijo nada. Eso sonaba tan familiar. Una teoría comenzó a formarse.

—No puedo decirte lo que esta pensando, pero puedo suponerlo. Soy el que tiene más tiempo de conocerlo, soy el más cercano de todos. Casi me costó la vida el estar ahí – Dijo Jin secamente — pero al final, para mi, valió la pena, ¿sabes?.

— Creo que te entiendo – Taehyung contestó muy bajito.

—No sé exactamente que pasó entre ustedes dos. Pero de lo que he podido entender, ¿Park  tiene algo que ver? – Jin preguntó, lentamente sacando sus manos de los bolsillos, sacando los cigarros y el encendedor. Taehyung se quedó cerca, para guardar la privacidad y esperando con anticipación la chispa.

—Tienen una historia, creo – Tae confirmó —Estoy bastante emputado con los dos por ponerme en medio, pero quiero tener la oportunidad de platicar con RM, entender que hice mal, y tratar de enmendarlo. Parece que estoy haciendo eso mucho últimamente.

Jin se encogió de hombros, su cigarro encendido en su boca. —podrías decir eso. ¿Cuánto sabes? – Le ofreció un cigarro del paquete y Taehyung lo aceptó, inclinándose para que Jin lo encendiera.

Taehyung también se encogió de hombros — No mucho. Sé que Jimin y Namjoon se conocen, creo que por sus familias; conocí a su prima, Adora, y sé que es cercana a Jimin.