Athan.
Tras mi pequeña discusión con Kevin en el bar me voy dejando a Cristian con Erika hablando en la barra, no me siento nada bien después de todo lo que dijo, a decir verdad acababa de matar la poca esperanza que me quedaba con esas bonitas y para nada dañinas palabras, así que me meto en mi coche y voy a ver a Nick para comprar María y demás sustancias estupefacientes para pasarme un par de días pensando de la forma más relajada posible, o casi.
Una vez conseguido, pongo rumbo a casa, no quiero saber nada de nadie, necesito soledad para estar a mi bola y poder aclararme, o más bien para regocijarme en mi miseria a gusto.
Entro con mucho cuidado, para que nadie me note, cosa que no me hice falta, pues todos están en sus cuartos o han salido, al fin tengo algo de suerte desde que esta mierda comenzó de nuevo.
Y nada más, aquí estoy ahora, en mi cuarto, con la poca luz que la noche permite entrar a mi cuarto, liándome un porro y desgarrándome lo poco de corazón que me queda con cada canción de Linkin Park que suena de fondo, sobra decir que es mi grupo favorito.
No entiendo en qué momento llegó todo a desmadrarse de esta manera, todo estaba bien, ella por su lado y yo por el mío, sin nada más, sin problemas y ni más preocupaciones que mi tía o mantenerme en mi mundo por muy gris que fuera todo eso era más fácil.
Enciendo el porro y subo la música un poco, no sin antes apagar el móvil y esconder la batería para no tener la tentación de encenderlo y llamarla, lo cuál parece ridículo estando en la misma casa, pero hay una explicación: cuando voy ciego y estoy de bajón, paso de moverme, da igual a lo que sea y por quien sea.
Cuando he terminado de esconderla comienza lo bueno, empieza la canción numb, abro mi adorada botella de Jack Daniel's y pego un trago largo, noto cómo me pica pero me da igual, sigo fumando y al oír:
"I can't feel you there."
Algo en lo profundo de mí termina por romper, mi coraza desaparece y deja salir absolutamente todo el dolor que me ha estado produciendo estar cerca de ella sin poder ni siquiera decirle nada al respecto por no tener problemas con Kevin y Karen, vaya dúo están hechos.
Me derrumbo, las lágrimas comienzan a caer por mis mejillas, tan rápido como se disipa el humo, ojalá poder esfumarme así de rápido también-No puedo remediarlo, llevo demasiado tiempo frenando lo irreversible y evitando a mi misma mente, casi tanto como queriéndola a ella y ansiando besarla, pero besarla de verdad, no solo con los ojos o en sueños como llevo haciendo desde que me apartaron de ella.
Todo lo que he vivido con ella se me repite, una y otra vez en un bucle irrefrenable de recuerdos y emociones que comienza a consumirme por dentro como el fuego en el papel, decido poner la canción adecuada para morirme en paz y no puede ser otra que la que sonaba casi todas las veces que nos reencontrábamos: Dandelions.
Recuerdo cuando la conocí, la primera vez que sus pequeños ojos de niña me miraron con esa vulnerabilidad y a la vez esa fuerza, cuando agarré su mano por primera vez y conseguí que viniera conmigo después de pegarle a su hermano por tratar de hacer lo mismo, cuando me contaba todas las cosas que hacía con una alegría sin precedentes y cómo me gustaba escucharla, por tonto que pareciera lo que decía le prestaba la atención que merece la mejor historia existente jamás contada con todo el cariño que se pueda llegar a tenerle, lo fuerte que fue cuando mi tía le hizo todo aquello a ella y a su familia siendo sólo una cría, lo fuerte que fue cuando la violaron y no había nadie para salvarla de ese asqueroso, aunque cuando me enteré de todo fui con Kevin a por ese tío de cabeza y sin pensarlo.Recuerdo lo fuerte que fue para rehacer su vida después de todo lo anterior y aguantar como una verdadera guerrera la mierda que le hacían en el instituto, también cuando la vi por primera vez tras cuatro años, iba preciosa, sonreía y sus ojos brillaban, llevaba una falda negra, botas de tacón, su camiseta de gungs'n roses, las cadenas a los costados de la falda y otras desde el collar hasta el cinturón, iba preciosa, en realidad siempre lo está.
Estaba con sus amigas en el aparcamiento de aquel bar, riendo y bailando, haciendo el tonto como sólo a ella le sale y entonces él apareció y rompió la magia que ella crea a mis ojos, la agarró de la cintura y la besó, pero no había amor en sus ojos, sólo había amor por sus bragas.
Salí de allí lo más deprisa que pude, acelerando cada vez más, me quemaba esa imagen, dolía demasiado como para seguir mirándola, aunque para mi desgracia no paraba de repetirse en un bucle casi irrefrenable con cada parpadeo.
El suelo estaba mojado, había llovido hacía unas horas, el aire era tan frío que parecía cortar mi piel, pero daba lo mismo, necesitaba adrenalina... Y vaya si la conseguí... Perdí el control, la moto patinó y me caí de la moto dando vueltas por el asfalto hasta que choqué con algo y todo se volvió negro.
Lo último que se me vino a la mente fueron sus ojos, alegres, brillando como dos estrellas y el para siempre de su sonrisa.
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Helium: Corazón tocado.
Teen FictionNadie espera que tus mayores traumas vuelvan abofeteándote y menos aún descubrir que casi todo lo que has creído más de una década ha sido una gran mentira, como tampoco esperas que tu amor de infancia aparezca y se vuelva tu mayor apoyo. Mi nombre...