Efecto mariposa | It + It cast.

3. Dentro de la película.

—¡Jack!— gritó Finn, y él y Jaeden corrieron hacia el nombrado mientras sus...los...Agh, el otro grupo iba hacia Ben Hanscom.

Jack tenía toda la ropa embarrada (el traje semiformal de la presentación) y mojada. Jadea agitado. Un hilo de sangre le corre por el brazo izquierdo, por lo demás, parece bastante más ileso que Ben Hanscom.

—¿Finn?— la voz de Jack es entrecortada por su agitada respiración.

—Demonios, ¿estás bien, Jack?— le pregunta esta vez Jaeden.

Jack se siente un poco aliviado, al menos no está solo en esta locura.

Finn, por su parte, toma el rostro de Jack entre sus manos y lo revisa centímetro a centímetro.
Lo mismo con el resto de él, parándose en su brazo herido.

—Jack, estás sangrando— dice Finn alarmado.

—Estoy bien, solo es un rasguño— Jack se pone de pie con ayuda de Finn, que lo sostiene de ambos brazos—. Pero ¿sabes? Las caídas parecen doler mucho menos en las películas.

Finn lo envuelve en un torpe abrazo, sin importarle el barro (porque de todas formas su traje ya está cubierto de barro y aguas grises).

Jaeden resopla y pregunta con voz nerviosa:

—¿Alguno de ustedes sabe que es lo que está sucediendo?

Finn abre la boca para proponer su teoría de que están en coma, y que de alguna forma están los tres en una especie de mente colectiva, pero entonces un grito muy agudo los sobresalta a todos.

—¡Tiene mi cara, Richie! ¡Tiene mi maldita cara! ¡Tiene mi...— seguido de los gritos viene el sonido de ahogo.

Jack alza la vista y se encuentra con... ¿él mismo?

—Eddie r-r-respira.

—¡No puedo!

¿Eddie? Oh mierda. Si el otro era Ben Hanscom real, entonces ese es Eddie Kaspbrak. ¿Cómo es posible?

—¿Jack?— es la voz de Jaeden, que lo saca de su aturdimiento.

—Estamos dentro— afirma Jack, mirando como Richie toma a Eddie por los hombros y lo ayuda con su inhalador.

—¿Dentro de qué?— pregunta Finn, que le está ayudando a levantarse.

—Dentro de la película— Jack hace una mueca—. Creo que literalmente estamos dentro de It.

....

—Jeremy, Jeremy— el nombrado escucha lejana la voz—. Jeremy despierta, ¡Jeremy!

Él obedece y abre los ojos. Al principio, solo ve manchas borrosas, que a medida que parpadea se van aclarando. ¿Está vivo? ¿no lo mató la caída de los andamios? Y entonces descubre que el sol le da directo en los ojos... ¿Sol?, ¿no estaban en un lugar techado?

—¿Estás bien, Jeremy?— conoce esa voz.

—¿Chosen?

Al fin lo ve claramente. Chosen está casi sobre él, sacudiendolo suavemente y mirándolo con preocupación.

—¿Qué sucedió?— pregunta Jeremy, irguiendose hasta quedar sentado—. ¿Dónde estamos?

Chosen niega con la cabeza.

—Desperté aquí y te encontré inconsciente a mi lado, es todo lo que sé— responde—. Pero este lugar se parece a...

El resto de la frase queda suspendida. Jeremy mira a su alrededor y sus ojos se abren de par en par al reconocer el lugar.