El Camino Del Dragón.

Capitulo 9:"Roto"

     Habíamos llegado a Niveria y allí apareció Dela, la chica que conocí antes de perder la memoria, ahora todo era claro para mi y mis recuerdos que antes estaban borrosos.

—Ah estuvo cerca, verdad... —se rio para despues tomar aliento.
—Sergio, me llamo Sergio —le di una sonrisa para cambiar de humor.
—Espera... ¿recuperaste la memoria? —me miro asombrada, como si viera a alguien desconocido.
—Eso es, ahora todo es claro para mi mente —me tomo de los hombros.
—¿Te iras?
—¿Eh?
—¿Me dejaras aquí?, ahora no necesitas a nadie que te guíe devuelta a siogre

      Su cara era muy expresiva, parecía como si algo devastador hubiera pasado, Talvez ahora me quería a su lado.

—Claro que no, seguiré aquí contigo, llegamos hasta aquí y no me voy a rendir... No te rindas Trysta.

     Sus ojos parecían dos piscinas ilumina por la luna, se iluminaron a yo decir eso, me abrazo para despues llorar sobre mi hombro.

—No me arrepiento de haberte ayudado —se separo se mi y se seco las lagrimas.
—Nunca te dejaré atrás —miro a  aticus —, ni a ti Aticus —acaricie su cabeza.
—¿No quieres seguir con tu vida normal?
—Ya no lo necesito, mi memoria Talvez haya vuelto pero... Quiero hacer nuevos recuerdos —respire profundo.

      Caminamos por 5 minutos mirando aun mas grabados en las paredes, no parecía haber una conexión mutua despues de que yo recuperara la memoria, era tan rara e incomoda nuestra comunicación, el calor era intenso y se notaba como cada vez nos acercabamos a Niveria, el suelo se estaba pintando de dorado y su brillo era hermoso.

—Dela es, mi hermana.
—¿¡que!? —me sorprendí al escuchar aquellas palabras.
—No de sangre, ella es mi hermana espiritual ya que ella fue quien se crío conmigo en la entrada de Niveria.
—¿Porque no intentaron hablar de eso? —me sentía confuso.
—Ignis.
—¿que?
—Ese es su nombre, Ignis, es un híbrido mitad dragón y mitad humano con la capacidad de abrir sus alas y volar, su cabello naranja fuego esconde sus escamas —Parecía tener cierto rencor a aquel sujeto —, a ella no le importo nada, se fue con su novio a Niveria como protectora de la entrada —
—¿Un híbrido? —eso era algo muy extraño de oír en estos tiempos.

     Durante unos segundos hubo silencio para despues sonar una golpe, algo parecía salir de la lava y no parecía un dragón.

—Debemos irnos rápido, esos son los dragones muertos —Siguió avanzado.
—Lo dices como si fuera lo mas normal del mundo.
—Lo digo así porque ya e estado aquí antes.
—Tiene sentido.

     Caminamos de manera rapida, el tiempo parecía correr de manera diferente en la cueva, una materia color gris salio de las paredes, parecían sombras de dragones aunque estos poseían los huesos salidos de la piel y una transparencia casi completa.Trysta me tomo del la cintura y comenzó a correr, cada vez eran mas los que salían e incluso del techo provenían.

—Ahora es cuando, ¿listo Aticus?
—Vamos para allá —cambio de forma a un cohete que rápidamente salio volando.

      Denuevo la velocidad alcanzo una al sonido, detrás de nosotros seguían apareciendo los cuales parecían querer tomarnos, todo iba de manera rapida y en poco tiempo llegamos al final del camino.

—No tengas miedo Sergio, hay una entrada secreta —dio un salto y allí se tomo de las rocas para despues entrar.

     Aticus hizo lo mismo y porque no, yo también lo hice aunque con algunas dificultades, del otro lado había unas estructuras de color dorado y pequeños charcos de lava, parecía que era Niveria lo que mis ojos podían observar, los dragones volaban por lo alto y ancho de las superficies aunque habían otra cosa que llamaba mi atención.

—¿Que son esas criaturas que parecen humanos?
—Son híbridas creados por la primitiva ciencia que tenemos, se intentaba hacer un humano perfecto mezclando el ADN de las dos especies, tomando el cuerpo de un niño como base y el ADN del dragón —se tomo un reparó para despues recordar algo—, eso estuvo mal, arruinaron a sientos de niños, no se les dio eleccion y los arruinaron —dejo caer un par de lagrimas.
—¿Porque lloras?
—No fue de mi incumbencia haber visto ese proceso, es una adolescente ingenua —respiro profundo—, defiendo al bosque y a la naturaleza para que no intenten dañar si equilibrio, lastimar a otro ser vivo para beneficio único y personal es cruel —
—Las personas no tienen la culpa —Aticus parecía tener otro punto de vista.
—Sabes que Ignis el cual es uno de los últimos hibridos daño la mente de Dela y a el le arruinaron la mente, ¿no crees que la humanidad sea ele principal error de la... Naturaleza? —lo miro a los ojos.
—Tu lo haces sonar peor, esto no resuelve el problema.
—Veo que tu no crees en mi razón —se cruzo de brazos—, vamos Sergio se que tu tienes el mismo punto de vista que yo —

     La mire un poco incomodo, me pare al lado de Aticus para que supiera lo que opinada sin decir una palabra.

—Ahora tu eres diferente, eso pasa cuando tu eres de un pueblo, pensé que tendrías la mente con la que yo te conocí —se fue.
—¡Espera!
—Deja que se vaya, despues va a volver y nunca lo olvides, "nadie te necesita" —hablo con un tono serio, me subí sobre su lomo viendo como se alejaba Trysta del lugar.

       Nada parecía tener sentido, solo ibamos de un lugar a otro para despues seguir, el silencio era algo que ya no existía siendo por el ruido de los dragones.

—¿Crees que Trysta este bien?
—Ella aveces es muy compulsiva, no creo que le pase nada malo además de que se sabe defender —retomo el aliento y siguió caminando.
—No es lo mismo sin Trysta.
—Yo digo lo mismo, según el calor y la humedad son las, 8 de la noche por lo que deberíamos buscar un lugar donde dormir.
—Esta bien —le acaricie la cabeza.
—No hagas eso, me da comezón —

     Aun parecía algo extraño ver como todo cambio rápidamente en tan solo un día, Trysta siendo la mas reflejada al respecto, Aticus camino los siguientes 20 minutos buscando un lugar donde descansar hasta llegar a detrás de un unas enormes piedras, parecía un escondite lo bastante grande como para 2 personas y un lobo.

—¿Aun sigues pensando en ella?
—¿Como lo sabes? —estaba pensando en eso sin despegar mi mente de eso.
—Solo veo tu rostro, se nota que la extrañas.
—Es algo extraño de decir la verdad.
—Te entiendo, creo que mañana todo volverá a la normalidad, veras a Vampela y Trysta volverá —dijo Aticus.