Viaje de memorias.

C a p í t u l o_5

;; W o n d e r l a n d.

Gritos eufóricos se hicieron escuchar por parte de aquellos humildes ciudadanos que ahora saborearían la dulce libertad. Habían cargado a Briggitte alzándola en el aire manteniendo una expresión que inspiraba nada más que vasta felicidad. La heroína, entre risillas pudo divisar a aquel híbrido el cual sólo estaba en un rincón sonriendo débilmente.

Al cabo de unas horas ya estaba despidiendo a los aldeanos, exceptuando a aquel espécimen que caminó hasta ella tras una seña. La misma niña le volvió a sonreír.

---- ¿Por qué no vienes conmigo? Estoy en busca de unos guerreros que me ayuden a proteger las áreas más sensibles de mi planeta.

---- ¿Yo?

Se señaló a sí mismo en una expresión incrédula.

---- Pero, ¿no ha visto lo débil que soy? Digo, no sé si sea capaz de ayudarla a usted.

A veces tartamudeaba al hablar, y justo cuando iba a proseguir Briggitte lo interrumpió.

---- Careces de cobardía más bien, ¡¿acaso no recuerdas cómo golpeaste a ese hombre?! ¡No te rendiste y a pesar de estar en el suelo simplemente no les dejaste matarte!, respóndeme algo, de ser un cobarde ¿seguirías vivo? Eres el valiente guerrero al que busco; oye, confía en mí, ¿quién dice que no podrás? Nada te lo asegura, y el único que puede aprovechar toda esa fuerza eres tú.

El contrario se lo pensó manteniendo la mirada gacha, al igual que esa postura que ya era característica de él.

---- Yo...

Cuando volteaba a ver los demás lo miraban en esa típica expresión de aprobación y felicidad, tratando de convencerlo. Aunque otros sólo le dedicaron miradas de suma indiferencia o hasta seriedad. Finalmente, con una voz que inspiraba seguridad y firmeza concluyó:

---- Prometo no fallarle entonces.

---- ¡Bien, hecho está! ¡Me llamo Briggitte! ¿Qué hay de ti?

El híbrido no respondió, sólo mantuvo la mirada gacha para verla con ese semblante ya característico.

---- Como siempre he estado solo nunca he visto la necesidad de recordar mi nombre real. 

---- ¡Entonces te llamaré...!

La chica se lo pensó un poco, podría ponerle un apodo de significado simple pero contrastante con su personalidad y habilidades.

---- Le courage.

---- ¿Le-? ¿Qué?

---- Le courage, significa "valentía" en francés.

Alzó el dedo índice mientras hablaba. De inmediato, el nuevo guerrero que adoptó el nombre de "Le courage" sonrió ampliamente achinando levemente sus ojos.

Y es que sin nada más, luego de despedirse de todos se llevó consigo al nuevo 'aventurero' atravesando fácilmente aquel portal que tuvo que extenderse. Y ya afuera, capturó el planeta de esas zonas peligrosas, guardándolo en una esfera que se adaptó a su imagen y semejanza.

Ahora, Le courage acompaño a Briggitte por aquel pasillo desconociendo su paradero. Está de más mencionar que este mismo estaba boquiabierto con todo lo que se topaba, ¡¿cómo podrías tener acceso a una infinidad de planetas como si fueran simples puertas?! ¡Ni él podía creérselo!

---- ¿En dónde estamos?

Preguntó él juntando ambas manos, arrastrando como de costumbre su gran cola, manteniendo esa postura encorvada más esa expresión que trataba sobre una extraña combinación entre timidez y miedo.