(. . .)
Su hija ya tenía dos semanas enteras de practicas largas llenas de esfuerzo.
Y los frutos aún siendo por menores ya estaban rindiendo. Aprendía rápido, y no esperaba menos de su inteligente pequeña. Sin embargo aún mantenía su postura listo para huir si al del sombrero se le escapaba la cordura.
Ese día era domingo, el del sombrero y la niña practicaban en aquella habitación de prueba, mientras el científico caminaba por la mansión, admirando el silencio, la soledad, la… Paz. La joven alebrije y el osito estaban a cargo de una entrega y la científica residente estaba encerrada por ella misma creando un aparato para el lord de la mansión.
Sólo podía escuchar sus zapatillas chasquear con cada paso en su recorrido, disfrutaba de aquello, en su casa normalmente no había silencio, mucho menos en su trabajo. Sus pasos se detuvieron en la cocina, la observó por unos segundos para luego adentrarse en ella e ir directo al comedor, este tenía un mantel carmesí con detalles negros, su mano fue en dirección de uno de los extremos del mantel para poder levantarlo un poco, y ahí estaban, en una de las orillas de la mesa, ligeras marcas de arañazos.
“—A-Ah… J-Jef… Jefecito, esto n-no es necesario… —Procunció entre suaves suspiros el menor.
—Callate. —El mayor de sombrero daba suaves lamidas que subían traviesas por el cuello del doctor, asegurándose de explorar cada rincón de su cuello. —¡Ya quitate esa cosa! —Exclamó arrancando la bolsa de la cabeza del muchacho, y sin dudar mucho comenzó a devorar con ímpetu los finos labios delicados.
El menor como se le hacía posible correspondía, y poco a poco sentía que el demonio lo acorralaba contra la mesa, el mayor aferro su garras en la madera del mueble separándose del castaño para poder apreciar esas negras y grandes cuencas del menor.
—S-Señor dejará marcas en sa mesa…
—Callate, idiota, el mantel las cubrirá. —Dijo y acto seguido tomo de las caderas al joven para subirlo sobre la mesa. —Ademas… Si se rompe o algo puedo cambiarla de inmediato. —Finalizó con una sonrisa ladina para luego unir sus labios nuevamente.”
El de la bolsa pasó sus dedos por aquellos rasguños recordando aquel suceso. —Y se olvidó de cambiar la mesa… —Soltó un suspiro dejando el mantel en su lugar para luego continuar su recorrido.
Sus pasos fueron hasta un salón con grandes puertas, entró tranquilamente viendo el interior, un sillón de terciopelo rojo frente a una chimenea a de llamas danzantes y verdosas, el carraspeo de la leña quemándose era lo único que se podía escuchar en aquella habitación.
Apunto de llevar su mano a respaldo del sofá..
“Los gruñidos, jadeos y gemidos inundaban la habitación. El joven despojado de su bolsa quien se encontraba sobre el demonio subía y bajaba sus caderas dándole un espectáculo erótico al del sombrero.
—Vaya que sabe como ¡Nhg!… Moverse doctor. —El demonio dejaba escapar suaves jadeos tomando entre sus garras las caderas del muchacho para intensificar las embestidas.
El castaño dejo escapar gemidos y peticiones lujuriosas. —S-Señor… Y-yo… ¡ah! ¡Lo amo!
El mayor sonrió con malicia. —Eso es muy interesante, demuestrame ese “amor” pequeña sabandija. —Dijo y comenzó a meter varias de sus extensiones en la boca del chico. ”
Alejó su mano de manera inmediata cuando ese recuerdo pasó por su mente, tragó saliva y salio rápidamente de aquella habitación, al cerrar las puertas llevo su mano a su pecho intentado controlar su respiración algo agitada.
—¿Qué fue eso? —se preguntó recordando aquella visión pasada que tuvo en la habitación.
Caminó nuevamente intentando calmarse, era como si su mente continuara con traumas por lo que pasó en esa casa hace años. Y de repente un recuerdo escalofriante procedió al ver las grandes puertas del despacho del demonio.
“El joven entró con temor a la oficina del demonio, sudaba en exceso y su corazón parecía salirse del pecho.
—S-Señor Black Hat…
—¿Qué deseas Flug? —dijo sin apartar la vista de algunos papeles que se dedicaba a firmar.
El menor se acercó temeroso y con algo de torpeza sacó una hoja de papel doblada para luego ponerla sobre el escritorio del demonio. —S-Señor tengo que decirle algo…
El contrario le dio una mirada interrogante. —¿Qué pasa, Flug? —Al ver la hoja de papel doblada que el de la bolsa había dejado sobre el escritorio su curiosidad lo llevo a abrirla y leerla. Su mirada se llenó de asombro y confusión por el contenido.
—Black… E-Estoy… Em-Embarazado. —Espero alguna reacción por parte del mayor. —¿B-Black?
—Vas a sacarte esa cosa.
—¿E-Eh? Pe-pero si es nuestro hij—Fue interrumpido por el agarre abrupto del cuello de su camisa, sin poder reaccionar su cuerpo fue elevado.
—Dije, vas a sacarte esa cosa, no es nuestro “hijo” y no lo será, más te vale buscar una solución antes de que yo mismo te lo arranque de las tripas. —El del sombrero ordenó aquello con esa voz tan distorsionada y demoniaca logrando arrancar lágrimas del menor.
—P-Pero señor… N-no sé co-com—La interrupción de su cuerpo golpeando el suelo lo hizo callar, Black lo había dejado caer.
—Mas te vale buscar como sacarlo, no quiero que alojes esa estupidez en ti. —Dijo como si nada regresando tras su escritorio para enfocarse en su trabajo. —¿Entendido? Si no lo haces rápido tendrás consecuencias. ”
En silencio, se encontraba con su mirada perdida en el suelo, no veía nada, solo pensadaba, ¿acaso nunca podría olvidar todo eso?
“—¡Black Hat! ¡pa-para! ¡lo mataras! —Rogó el castaño quien estaba ensangrentado sobre la cama del demonio, múltiples rasguños habían en su cuerpo hechos por el aludido.
—Por mi que se muera… —dijo tajante mientras obligaba al menor a verle a los ojos. —Has estado evitando nuestros encunetros por esa maldita cosa, para mi que merece morir… —Dijo comenzando a pasar una de sus garras por el abdomen del joven abriendo una pequeña herida.
—N-No… —rogó a voz débil.— ¡N-No!”
—¡NO! —despertó de golpe encontrándose en un sofá con una manta sobre su torso, esto lo confundió ligeramente, llevo su mirada en busca de alguien cerca, para su sorpresa ahí estaba Black Hat, sentando con la pequeña de cabello castaño recostada en sus piernas durmiendo plácidamente.
—Hasta que despiertas, quitame al parásito de encima. —Expresó señalando a la menor que dormía con una tranquila sonrisa.
—¿Cómo llegué aquí?
—Estabas desmayado frente a mi despacho, así que te traje aquí y la mocosa te cubrió con una manta. —Explicó sin mucho interés.
—Ya veo. —El joven de la bolsa se levantó para ir a tomar a su hija y acarrucarla entre sus brazos. —Nos vemos mañana. —Se despidió y de encaminó hasta la puerta para salir de aquel lugar.
—¿Enserio aún recuerdas todo eso, Flug? —Murmuro para si mismo luego de ver al científico retirarse.
(. . .)
Holissss retoñitos.
Una explicación: ¿Por que 5.5? bueno, es un capítulo corto, apenas llega a las mil palabras, y como éste, puede que hayan varios, estos capítulos seran para los saltos de tiempo en la trama, en el capitulo siguiente (Capitulo 6) ya habrá transcurrido un mes.
Otra cosa es que en estos cortos habrán perspectivas de un sólo personaje, así que cuando vean capítulos que tengan el “.5” será corto :³
Sin más, ¡hasta la próxima!
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Six Years Later ❴Paperhat❵
FanfictionKenning Flug Slys, un excelente científico, y un excelente padre soltero. Al tener veintitrés años mantuvo una relación con su ex-jefe, resultado de esta "relación" hubo un embarazo no deseado por una de las partes, Flug se vería forzado a huir de a...