Los relatos eróticos, la manera de imaginar que estás con esa persona que te gusta o esa persona inalcanzable que te gustaría tener...Da igual que sea un cantante, un chico que te gusta y actor que te guste...los relatos eróticos son situaciones que...
Llamó a mi puerta y entró para enseñarme como se hace la masa de la pizza, llevaba una bolsas de las cosas para hacerme el trabajo.
Güney estaba vestido de negro con un delantal de rallas y yo estaba muy nerviosa de pensar en cómo iba aguantar sin sexo.
Y se empezó a reír viendo esas mejillas en su cara y esos oyuelos que me vuelven loca.
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-¿De que te ríes? Le dije.
-De nada...¿No quieres que te enseñe amasar la masa? Ven.
Ponte detrás de mí. Me puse detrás de él, se aproxima a mí, pagando su sexo en mi trasero, coge harina y me empapa de ella. -Coge la masa y mueve la masa de arriba y abajo, pero empapate las manos de harina.
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-Güney, ¿Lo hago bien? Le dije empezó a echarme a ponerme harina por el escote y yo a él también por la cara y el pecho.
-Mnmm muñeca, me estoy poniendo malo. Y se rozó contra mi su sexo en mí.
Y yo gemía, de placer. Sentía que se estaba empalmado dejó la masa que repose un poco. Y empezó el juego.
Me dió media vuelta y empezó a besarme, le quité la ropa, el delantal, él me subió el camisón poco a poco sin dejar de besarme, me untó de harina los senos, dejándolos blancos y erectos.
Después de hacerme eso, se bajó los pantalones y él me quitó las bragas y tocó mi sexo con la punta de su sexo dando golpes en mi sexo, cogió un condón y me lo introdujo dentro de mi vagina dándome embestidas brutales contra la encimera fuertemente.
-Dameee más fuerte Güney. Me encanta. Le dije que íbamos a vivir aventuras en el bloque. Dame más fuerte.
-Lo que tú quieras, muñeca...me estaba dando por detrás encima de la encimera llena de harina por mi cuerpo, me encantaba como me follaba la verdad no podía parar de gemir y yo cada vez estaba más cerca de mi orgasmo múltiple, me tumbó en la encimera quería más y más....
Hasta que noté que él también llegó al orgasmo dandome embestidas brutales contra mi sexo. Se corrió echando la cabeza hacia atrás, echando todo en el condón.
