Los relatos eróticos, la manera de imaginar que estás con esa persona que te gusta o esa persona inalcanzable que te gustaría tener...Da igual que sea un cantante, un chico que te gusta y actor que te guste...los relatos eróticos son situaciones que...
Esa cena después del probador fue de lo más erótico que he vivido en mis años, yo me senté enfrente suya, para verlo mejor, pues es tan sexy y con esa sonrisa increíble que me desenvuelve y me vuelve a enloquecer.
Pedimos un buen vino tinto, brindé con él, la carta de presentación para ver el menú era increíble, pues había muchas propuestas para cenar.
Yo me decanté por una crema de gambas, una carne tipo kebak pero como asada y él un una ensalada turca y lo mismo que yo de segundo.
En lo que estaba pendiente de él, de su boca, sus ojos me descalzé y puse el pie en su pierna.
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él casi se atraganta pero no me dijo nada solo sonrió y miró mi pie en él. Me dijo que me cambie de sitio y me ponga con él. Pues mientras yo cenaba mi comida le empecé acariciar su pierna.
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Poco a poco esa mano subió a su paquete donde por encima lo acaricié suave sintiendo que se le apretó el pantalón.
No podía desabrochar ese pantalón y sacárselo y ponerme hacerle una paja pues era una cosa rápida y no era plan de sacarla ahí pero me dió ganas. Pero él a llevar yo vestido si me masturbó,e abrió las piernas y me retiró el tanga y para que más, comenzó a mover mi clítoris fuertemente que yo me estaba retorciendo no podía ni hacer un gesto de gusto pues la gente se daría cuenta de aquello.
Seguía moviendo sus dedos dentro de mi.
Más y más fuerte y yo no podía aguantar más así que me corrí a lo fuente y gemí que no se cómo nadie se dio cuenta. Él sacó los dedos empapados de mis fluidos y se lo secó en un clínex que le di.
-Te voy a matar Vural...le dije. -Menos mal que la mesa esta retirada si no.
-Has empezado tú tomando mi pene por encima de pantalón. Te voy a follar nena, tengo que acabarte y no se dónde.
-En el baño, aunque hemos repetido. Pero aquí están abajo en unas escaleras y no están vísto bajo yo y tú pagas y bajas.
-Ok me dió un cachete en el culo.
Bajé abajo y lo esperé, cuando lo vi me metió en el baño suyo y en el mismo lavabo se bajó los pantalones y yo el tanga y me folló así fuertemente contra a mi.
No paraba de penetrarme fuertemente contra él, mis gemidos hundían ese sitio, tan lujoso. Se movía más y más hasta que noté ese orgasmo tan fantástico, por suerte nadie del restaurante se dió cuenta pues con la de gente que había salimos bien de aquello.
Cuando llegamos a casa nos pusimos a ver series y nos quedamos dormidos en el sofá.
