4. Nuevos comienzos

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Cuando suena el timbre que indicaba el final de la clase yo me quedo un poco más ordenando mis cosas.

Adrián se me queda mirando, dudando de si esperarme y salir juntos (lo que supondría sentarnos juntos en el almuerzo, sabía que sería así, ya que el es demasiado cortés, y vería un gesto de mala educación el irse por otro lado) o irse.

Finalmente decide despedirse de mi e irse con sus amigos.

En parte lo agradecia, me gusta tomarme mi tiempo, y pues también prefiero estar sola pensando en mis cosas.

Una vez salgo de clase, me dirijo al árbol donde siempre me quedo durante los almuerzos mientras como y escucho música o algo parecido. Me encantaba estar así, lejos de toda esa falsedad y teniendo tiempo para pensar en mis cosas etc.

En ese momento no podía parar de pensar en el dichoso trabajo de biología y en la de tiempo que estaré junto a Marcos.

De la nada escucho unas risas y unos silbidos, me giro y veo a unos tres chicos "hablando" con Verónica.

-Iros a tomar un poco por culo, gracias- Dijo mientras se daba la vuelta para darles la espalda, seguidamente me vio observando la escena y se acercó a mi.

-Ey ¿Que tal va todo?- Dijo sonriendome y sentándose junto a mí en el árbol como si no hubiera pasado nada de lo de esos chicos.

-Mm, supongo que bien... - lo dije un poco dudosa ya que no entendía tanta amabilidad y buen rollo. Ya lo sé, se llama educación, pero igualmente yo de primeras desconfío de todo el mundo.

Cómo si me leyese el pensamiento Verónica empezó a decir -Me parece bien que desconfies de la gente, hay mucho falso por ahí suelto, pero desde ya te digo que de mi no hace falta que desconfies, no voy a malas ni mucho menos, no soy como Bárbara- Al decir esto último rodó los ojos en señal de aburrimiento.

-En cierto modo me "alivia" que digas eso, pero igualmente la desconfianza se me quita con hechos y no con palabras, sé que de primeras puede sonar cortante lo sé, pero la experiencia me ha hecho darme cuenta de que soy así- Era verdad, necesitaba que las otras personas me demostrasen que tenían interés por conocerme, sino soy como un libro con un candado que nadie puede abrir.

-Y lo entiendo perfectamente, yo también soy bastante así, no dejo que nadie entre y salga de mi vida muy fácilmente, asi que le veo toda la razón a lo que dices-
Por lo que se, ella es muy selectiva, y por eso no es que tenga demasiados amigos, aunque se lleve bien con muchos otros.

Mientras pensaba en lo que acababa de decir ella siguió hablando - Por cierto, antes no me has afirmado nada de lo que te he dicho en el pasillo, asi que insisto, por la cara que has puesto cuando han dicho lo de los trabajos he visto que no te hacía mucha gracia hacerlo con Marcos. ¿O me equivoco?- Esto último lo dijo sonriendo, creo que esperando que le dijera que tenía razón.

-La verdad es que no me hace mucha gracia la verdad, aunque me ha dicho que se lo va a tomar en serio. No sé qué creer sinceramente, me siento como en una puta historia de Wattpad- Ella se rió mucho ante mi comentario.

-Me imagino el título y todo, A partir del trabajo de Biología. ¡No no! La fachada de malote- Dijo esto mientras levantaba la mano y hacia un semicírculo en el aire como si estuviera haciendo un arcoiris, el meme este de Bob Esponja vaya. Yo no pude evitar reírme, sonaba muy a nombre de historia de Wattpad.

-Espero que no siga siendo así de cliché, porque todo el mundo sabe cómo acaba la historia- No podía esconder la poca emoción que me transmitía esto en mi tono de voz.

-Oh, en un precioso y hermoso romance en el que la chica tímida y el malote se enamoran. Que historia tan genial- No pudo contener más la risa y empezó a reírse muchísimo.

-Ja ja ja, no gracias, es lo último que necesito- Y menos de alguien cómo él.

-Ahora en serio, yo creo que le estás juzgado muy pronto, espera a ver qué pasa, quizás sea verdad y sea un buen tío- Ella misma lo dijo: Quizás.

-No lo se, pero cambiemos de tema- Todo el rato hablando de Marcos estaba siendo ya bastante aburrido.

-Perfecto, puede que sea un poco directo esto pero bueno. ¿Por qué no te has defendido contra Bárbara?- Sinceramente me sorprendió que sacase ese tema, después del buen rollo que había, no me esperaba un tema así.

-Pienso que no vale la pena, y que algún día se cansará-

-¿Y por qué crees que no vale la pena?- Lo dijo con demasiada seriedad, lo cual me llamó la atención.

-Porque solo es alguien a quien le gusta molestar a los demás, con bastante poca empatía, al ni siquiera pensar en cómo se sentirán las otras personas. No veo necesario prestarle atención a gente como ella.
Lo dejo pasar y ya, algún día verá que no me afecta lo que dice y pasará de mi- Era totalmente cierto, no veía la necesidad de entrar al trapo con ella.

El el momento en el que ella había abierto la boca para contestarme sonó el timbre.
Por alguna razón no quería seguir esa conversación así que esta coincidencia la agradecí bastante.

Cuándo no era nadie Donde viven las historias. Descúbrelo ahora