Asentí y me fui, pensando en que cuando eso ocurrió, yo estaba en la librería, pero si llego a ir al bar para tomar algo, habría podido caerme a mí ese tejado. Suspiré aliviada por haber decidido ir a la librería con Namjoon y seguí mi camino hasta el bar.
Me encontré con Jungkook guardando su mochila, acababa de llegar. Me acerqué a él y le puse la mano en la espalda, haciendo que se sobresaltara, estaba dado la vuelta y se giró para mirarme.
—Me has asustado, boba—me golpeó el brazo. —Era mi intención—le hice burla—¿Te has enterado? Se ha caído parte de un tejado y ha herido a dos personas. —Ah, si, lo he visto al venir. Menos mal que no hemos pasado en esos momentos. —Yo casi lo hago, pero menos mal que me he ido con Namjoon a la librería. —¿Namjoon, eh? ¿O quizá Jaebum?
En ese momento le dediqué mi mirada más confusa y asqueada posible, no tenía ni idea de que hablaba.
—¿Jaebum? —Si, me ha dicho que tenéis algo.
Cuando me lo dijo, quise gritar, Jaebum había esparcido un falso rumor después de intentar violarme ¡Y en solo un día!
—¡No! De hecho, me cae mal. No sé porque dijo algo así. —Vaya, yo tampoco... En fin, hablaré con él. —No, déjalo.
Suspiré y me puse a trabajar.
No estaba muy animada como para trabajar, pero no podía hacer nada, necesitaba transmitir positividad a los clientes.
Mientras trabajaba, no podía parar de pensar en Namjoon, miraba a cada cliente con la esperanza de que fuera él, pero no apareció.
Terminé temprano de trabajar, no había mucha gente, quizá porque en el bar de al lado estaban las bebidas más baratas durante ese día.
No había mucha gente por la calle, excepto alguien encapuchado que no me daba muy buena espina. Llevaba el número de emergencias apuntado y ya estaba hiperventilando, me recordaba a aquella vez donde Namjoon apareció por primera vez. Iba a llamar a Jimin cuando vi a alguien delante mío, no lo reconocí hasta que me llamó.
—¿Minah? —¡Namjoon!—me acerqué donde él y le agarré del brazo—perdón, pero había alguien y creo que me estaba siguiendo. —No te preocupes, ya estoy aquí. —¿Dónde ibas?—pregunté. —A tu bar, pero por lo que veo ya has cerrado. —Si, no había gente... —Vamos, te acompaño a casa.
Acepté y fuimos hasta mi hogar hablando, me sentía bien con él, sin embargo, no sabía prácticamente nada de él. Intentaba conocerle más, pero es como si hubiera un muro delante de él que no me permitía saber más sobre su persona, siempre evitaba conversaciones que se centraran en sí mismo.
—¿Mañana tienes algo que hacer?—le pregunté cuando estábamos en mi puerta. —Tengo que trabajar, pero si estoy libre te aviso. —Ah, vale. Hasta otra.
Llegué a casa y saludé a Yeontan. Alguien me llamó por teléfono, Jimin.
—¿Dónde estás, Minah? —En casa ¿Por? —¿Ya has salido de trabajar? Me has tenido que avisar para ir a por ti—advirtió en tono serio. —Lo siento, pero no quería molestarte. —Tú nunca me vas a molestar ¿Has llegado bien a casa? —Si, gracias por preguntar. —No es nada, pequeña—adoraba cuando Jimin me trataba de esa forma—mañana voy a tu casa a comer, hazme algo rico. —Vale ChimChim.
Colgué y me preparé para dormir, no sin antes buscar a Tannie y echarlo a mi cama para dormir conmigo.
Me levanté por los mini lametones de Yeontan, le acaricié y me levanté para prepararme.
Después de alistarme, limpié mi habitación y me puse a leer el libro que me compré.
La historia era adictiva, no sabía si por la trama o porque realmente me sentía como la chica, loca por unos hoyuelos de alguien que casi ni conocía, eso me hizo replantearme algo. Sentía algo por Namjoon o quizá me estaba emocionando mucho con la novela, de todas formas, quería ver a Namjoon y saber más sobre él.
Hice algo de comer para cuando viniese Jimin y lo esperé viendo la tele.
Alguien llamó el timbre, seguramente sería mi mejor amigo.
—¡Minah!—Jimin me abrazó y yo le correspondí alegre. —Hola ChimChim, siéntate, la comida ya está lista.
Nos sentamos en las sillas del comedor y hablábamos mientras comíamos.
—¿Te has atrevido a hablar con ella?—no me gustaba sacar ese tema y a él no le gustaba hablar de ello. —No, no puedo hacerlo... —A ver idiota, con lo guapo, tierno y buena persona que eres ¿Cómo puedes tener miedo a hablarla?—siempre que hablaba de esto me enfadaba, odiaba su inseguridad, pero no podía hacer más que intentar ayudarle, aunque no servía de nada. —Hay muchos chicos mejores que yo, no se va a fijar en mí. —Te estás ganando un bofetón, por las tonterías que me dices. —Sabes que tengo razón.
Exploté y ya no podía controlar lo que salía por mi boca, por mucho que afectaría a nuestra bonita amistad.
—¿Sabes qué? Cuando tenía mi pandilla de amigas, todas estábamos locas por ti, incluida yo, ellas se atrevieron a hablarte y acabaron siendo tus novias o teniendo algo contigo y yo, por ser tímida, solo logré una amistad con la que estoy muy contenta, pero siempre me he preguntado que hubiera pasado si me hubiera atrevido a hablarte—le confesé, era cierto, pero nunca se lo llegué a decir, hasta ahora.
Su cara se volvió completamente roja, y no podía ni mirarme a los ojos, Jimin era muy tímido.
No sabía cómo tomarme eso ¿Él había estado enamorado de mí? ¿O lo seguía? Sin saber como reaccionar, seguí comiendo en silencio.
Cuando terminé, dejé el plato en el lavavajillas y me senté en el sofá, Jimin hizo lo mismo. Encendí la tele, sin embargo, él miraba me miraba a mí, me giré para ver porqué me observaba, cuando nuestros ojos se cruzaron, él miró hacia abajo sonriente y volvió a mí, entonces hizo algo que jamás me esperaría de él, me besó.
No sabía como responder, estaba en shock, quieta como una estatua y podría decir, que más pálida.
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Jimin antes de besarte
Hoy voy a subir otro cap más ❤️
Gracias a Lucy_sjvjjjr_93por leer y votar en mi historia. Besos para ti✨🖤
