Serendipity. [Markjin]

Adorable.

Era lunes ya y Jinyoung estaba nervioso mientras miraba a toda su nueva familia tomar su desayuno de forma caótica. Mark estaba callado tomando un jugo mientras leía unos papeles.

-¿Es una misión difícil, papá?-Jinyoung miró al niño que acababa de preguntar. Jeongin, de los más jóvenes. Mark también enfocó su vista en el pequeño y se acercó a él con una sonrisa serena. Despeinó su cabello y lo miró.

-Es una de esas donde cuando me voy necesito un abrazo suuuuuper fuerte de tuyo.-Jinyoung miró las expresiones de Mandie, ella se veía tensa.

-¿Para que ganes?- inquirió el pequeño.

-Y para tener más fuerza.- la sonrisa de Mark no se desvanecía. Jinyoung miró al resto de los sentados en la mesa, todos parecían conscientes del trabajo peligroso de Mark excepto los más pequeños. Jeongim sólo sabía que cuando fue el día de "ir al trabajo de nuestros padres" en la escuela, él no pudo ir al de Mark pero Mandie lo había llevado a un lugar lleno de computadoras.

-Bien.- asintió el pequeño. Jinyoung no se perdió de cómo todos abrazaban a Mark afuera y él estaba dudoso de unirse, después de todo, él apenas hacía días estaba con ellos.

-No seas tímido, Jinyoung. El barco no hace al Capitán, sino su tripulación.-Mandie lo empujó desde atrás mientras sostenía a Cassie. El peli negro chocó contra Younghyun y este le sonrió uniéndolo al gran abrazo.

Jinyoung comprendió el sentimiento de angustia que compartía esa familia ahora. Ellos gozaban ahora de una buena vida pero a cambio tenían que soportar algo así. El trabajo de Mark era jodido y hasta donde supo el de Mandie también pero ella estaba retirada para encargarse exclusivamente de los chicos.

-No te sientas mal, Jinyoung. La primera vez siempre es así. Mark siempre regresa.- Dahyun le susurró al lado. Ellos compartían la misma clase.

-Entiendo. ¿Y cuánto dura su misión esta vez?- preguntó mirando la pizarra.

-Oí a Mandie hablar por móvil anoche con Jaebum.- hizo una pausa cuando vio que la profesora los miró.-Probablemente estará fuera por días, era en Arizona. Una tarea de infiltración o algo así.-agregó.

-¡Kim y el nuevo!- la profesora alzó la voz dejando atónitos al par.-No es de extrañar de su familia.- bufó.

-Dígalo de nuevo.- espetó de repente Jae levantándose y apoyando sus manos en el banco mirando a la profesora.-¿Qué quiere decir con su comentario?- cuestionó enojado.

-Siéntese ahora mismo, Park, si no quiere pasar el resto de la tarde en detención.- sentenció la mujer.

-Siéntate, Jae. No vale la pena.- dijo Dahyun. Todos los alumnos se quedaron en silencio algunos sintiéndose impotentes ante la situación y otros simpatizando con la docente. El de anteojos se sentó abruptamente mientras rodaba los ojos, si no hacía lío era porque no quería llevarle problemas a Mandie y Mark. Pero le parecía injusto. No era la primera vez que situaciones así le ocurrían en la escuela, algunos profesores estaban disgustados con ellos por no venir de familias convencionales porque argumentaban que eran adolescentes el doble de problemáticos. Las notas de Jae no eran altas pero estaba en el promedio, Dahyun y Momo iban un año atrasadas y Younghyun había terminado con buenas notas para callarlos a todos. Wonpil también tenía buenas. Los agujeros negros en la escuela eran él, la chicas y Youngjae.