Grito

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Lance

Cuando era niño me imaginaba como un adulto, un chico inteligente y guapo que llegaría muy lejos. Creía que iba a ser un astronauta, que iría a mundos que nadie jamás ha conocido y que salvaría a muchas personas.

Cuando era niño pensaba que era una especie de elegido, un héroe que ayudaría a terminar con la maldad. Pelearía contra bestias, contra brujas y robots. Yo sería capaz de pelear por amor, que conocería una princesa y que ella sería como una luz, mi motivo de pelear, mi inspiración.

¿Qué fue de todo eso?

Ese niño de futuro brillante, parece ya no existir.

◼💀◼

—Por favor, Lotor. Dejame ir— rogué.

El alfa me había llevado a una especie de mansión apartada de todo. Me había sacado del auto a la fuerza y me había atado a una silla del comedor. En ningún momento había dejado de llorar. Estaba aterrado por lo que me pasaría, las palabras de Florona me atormentaban.

—Dime algo— el acarició mi mejilla y yo traté de apartarme de su tacto, eso provocó su ira. Me tomó con fuerza de mis mejillas y mi obligó a verlo—. ¿Me tienes miedo?

Asentí con temor, cerré mis ojos con fuerza. Él solo me acarició un poco mi cara para después apartarse. Abrí mis ojos de nuevo y lo miré, tenia una sonrisa aterradora y había tomado un afilado cuchillo. Temblaba con la idea de que me heriría.

—M-me, Me harás l-lo m-mismo que a Flor— dije apenas en un hilo de voz.

—Oh así que ella te contó lo que le hice hace un año— se rió amargamente y se acercó con el cuchillo en mano—. Cariño, yo no te haré eso... Contigo seré mucho peor. 

Su cuchillo provocó un corte en mi mejilla, apreté mis labios para no gritar y eso pareció enfurecerlo por lo que clavó el cuchillo en mi hombro, provocando apenas una herida un poco más profunda. Grité con todas mis fuerzas, estaba seguro de que mi garganta terminaría lastimada.

—Grita para mí, mi lindo omega.

Cuando era niño pensaba que yo podría lograr grandes cosas... Quisiera volver a esa época en que todo era más fácil.

Shiro

Keith conducía como loco por las calles, no se detuvo y maniobraba perfectamente entre los autos. Se saltaba los semáforos y se guiaba con una naturalidad increíble. No tardamos mucho en llegar a la carretera, íbamos demasiado rápido y una parte de mi deseaba llegar a tiempo.

Me encontraba en una especie de trance luego de que Keith actuara así en la cafetería. No es un Omega normal, eso me queda claro con esa actitud, incluso me recuerda mucho a Adam, la misma fuerza, y Lance... Él es físicamente parecido, pero tiene un corazón dulce y una sonrisa más grande.

Hay tantas cosas que he hecho mal en mi vida, pero la peor fue dejarme guiar por mis instintos. Dejar que me nublara el deseo y abandonar en el transcurso a Lance, él no merecía esto.

Maldita sea.

Marqué a Keith mientras que a mi otro omega lo violaban en una maldita fiesta. Si tan solo hubiera sido más inteligente, si no me hubiera dejado guiar por mis instintos... Joder.

Míos. •Voltron Au•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora