Seguramente conoces el arrebol, si no; déjame explicarte.
El arrebol es ese color que se forma, en este caso, cuando el sol está apunto de marcharse.
Es precioso, es una adicción a la vista, es por eso que es admirada por fotógrafos y pintores.
Pero, estoy segura de que no conoces la historia de amor que hay detrás de cada arrebol.
El sol; tan brillante y llamativo, hace su aparición cada día, y cada tarde, eventualmente se marcha.
El sol no sabía que tan brillante y fuerte podía ser, él no lo sabía.
En el transcurso de su naturalidad, conoció a otros seres que lo acompañaban en el cielo: las nubes.
Pero desgraciadamente las nubes eran livianas, tan livianas que se deshacían al tacto. En todo el transcurso del día, el sol era ajeno a aquello, para él no había nada inusitado en ellas, pero al llegar al atardecer, las nubes empezaron a lastimarse; y el sol, al darse cuenta de lo que estaba haciendo, llorando, decidió marcharse.
¿Qué tan culpable era él de hacer sufrir a las nubes de aquella manera? Él no había planeado aquello, y al darse cuenta de todo el daño que había causado, se marchó llorando al dejarlas, procurando que la noche sí se encargara de cuidarlas, algo que él no podía hacer por más que quisiera.
Y es que, es necesario explicar, que aquellas nubes estaban locas por el sol, pues, parecían felices sangrando, en ellas era tanto los efluvios de felicidad al ver todos los colores brillantes, que, inocentemente, no sentían dolor por aquello, pues ellas nunca odiaron al sol.
Tantas veces fotografíamos el cielo sin conocer esto, pues esta historia no solo pasa una vez, si no, todos los días.
Dios tenga misericordia del dolor del arrebol del atardecer, pues no es algo que se pueda detener.
El arrebol siempre se marcha, causando la oscuridad de la noche, y de alguna forma es consuelo del desastroso final del día, pero nada puede detener esta secuencia.
El dolor, como el arrebol del atardecer, es un ciclo indestructible.
Los rayos del sol que lastiman las nubes crean un tono carmesí apasionado. Es rojo, un signo de dolor, de advertencia, de vehemencia; de un peligro que no puede evitarse porque es adictivo, imposible de detener cuando los sucesos están destinados a pasar, de la manera en la que se pueda observar.
Los rayos visualmente amarillos (para el ser humano) pintan aquellas nubes. Amarillo brillante que usamos para señales de advertencia (en algunos casos por ser inestablemente explosivo) Es adictivo a la vista, es brillante, hacen que pensemos en días soleados y en momentos felices. El rosado/magenta por otro lado, se creía que era sensible, y por muchos años fue considerado frágil, y de alguna manera lo era, a pesar de que todas las personas lo enardecieran, no era temerario, nadie sabía lo que él era en verdad, y al tratarse del amarillo, se lograba manipular fácilmente.
Al combinarse estos dos ocurre esta fantasía, este amor fatal que llegó al paroxismo amatorio de una manera inestable. Porque al ser inestable de estas dos formas (débil emocionalmente y explosivo violentamente) no podía resultar algo bueno.
El dolor de Valeria está reflejado en cada arrebol, porque así como el cielo se lastima sangrando rojo en las nubes por los últimos rayos del sol: así ocurre en esta historia.
Este es todo el poema que inspira esta historia; situada en el bello México, lugar donde los personajes (a excepción de nuestra Valeria) viven y serán narrados intentando respetar sus personalidades y sus vidas, pero haciendo un pequeño arreglo con el fin de simplemente entretener al lector.
Aclaro que algunos comportamientos fundamentales de los personajes no son bien vistos en la vida real, no quiero que tengan una mala imagen de las personas que están involucradas en esta historia, pueden investigar a cada uno si es de su agrado y siempre deben de tener en claro que los dramas no son verídicos, así como la historia en sí.
Tambien soy consciente de los lectores que les desagrada las historias fanáticas de esta plataforma, sobre todo de influencers, pero justo por eso es que me vi en la necesidad de empatizar con estas personas, y arriesgandome a que rechacen este libro, y que no le den la oportunidad que se merece, seguiré respetando la idea que me inspiró hacer esta trama, sin cambiarle la originalidad que escribí por allá del 2018, porque antes del lector, está lo que el escritor le apasiona escribir, sin llegar a forzamientos por fama. Así que desde ahora advierto las profesiones que vienen siendo el segundo plano, y que no les hago tanto hincapié para abarcar toda la historia.
Toda la historia es mía y no acepto copia total o parcial de esta obra. Respeten el trabajo de una humilde escritora que se desveló, editó, reescribió; y se encargó de que esta historia fuese lo más perfecta posible, con el propósito de la satisfacción de hacer lo que más me apasiona, y ofrecerlo a los que verdaderamente estén interesados en ello.
La saga Arrebol está escrita con toda mi dedicación y amor. Espero que les guste tanto como a mi.
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Arrebol del Atardecer #1
PoetryEn el cielo se oirá su nombre entre las brisas tardías porque el arrebol será su aclamador. Él es testigo de toda la pena y dolor. Que el viento recuerde aquellos días, donde ella ofreció todo su amor. En aquel atardecer rojo, por culpa del sol. ...