Capítulo 10.- La tía viene

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Disclaimer
: Los personajes de Sherlock Holmes no me pertenecen, sino a su autor Sir Arthur Conan Doyle, la serie "Sherlock" pertenece a la BBC. Este fic lo hice sólo y únicamente como diversión.

Personajes: Sherlock, John Watson y otros.

Aclaraciones y Advertencia: Este fic contiene Slash, lemon, y lo que se me vaya ocurriendo, kesesesese.

Resumen:Sherlock, John y Sherly han formado una familia, ¿Qué sucede cuando la pequeña princesa decide que es tiempo de ingresar un nuevo miembro?

Beta:

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoO

La familia de papá

Capítulo 10.- La tía viene

Sherlock despertó adolorido, pero no se levantó de la cama, en su lugar, se enrolló en las sábanas, sin importarle que el otro ocupante pudiese sentir frío, aunque, para esas alturas, John ya no se encontraba en la habitación.

El doctor había sido despertado por un mensaje que llegó a su celular, anunciándole que Sherly no regresaría hasta la tarde. John se dedicó a preparar el desayuno para dos, pues tenía el presentimiento de que ese día no tendría que insistirle a Sherlock para que comiera; cuando estuvo todo listo, lo puso en una charola y la llevó a la habitación. Después de compartir los alimentos, se dedicaron a aprovechar, los objetos que aún permanecían en la mesita de noche.

Durante toda la mañana se dedicaron a amarse y probar los diferentes condones que tenían.

Sherly regresó una hora antes de la cena, siendo escoltada por Mycroft y el pequeño Smaug, que no se despegaba de su ama. Al político no le tomó mucho darse cuenta de lo que había entre su hermano y John, bastó con sólo ver al doctor para saberlo; no hizo ningún comentario al respecto, después de todo, su sobrina necesitaba afecto, algo para lo que Isabel y aun el mismo Sherlock no podían hacer.

Después de la cena, Sherly se sentó en el suelo, con Smaug acostado junto a ella, frente a ambos, se encontraba John, descansando en su sillón favorito.

—Sherly, ¿ya has hecho los deberes? —le preguntó John, pues la niña había estado fuera de casa casi dos días y no sabía si Greta o Mycroft la incitaron a realizar su tarea escolar.

La niña asintió con la cabeza, dando a entender que ya había cumplido con sus deberes escolares.

— ¿Cómo sigue tu mamá? —El tío Mycroft me dijo que es posible que muera en cualquier momento —John se enojó con el idiota de su cuñado, ¿Cómo se le ocurría decirle algo tan cruel a una niña? —. Hablaré con Greta, tal vez la convenza de venir a vivir con nosotros durante... un tiempo —Sherly negó con la cabeza.

—Mamá no quiere que la visite más, no desea que la recuerde así.

A John se le rompió el corazón; Sherly no derramaba ninguna lágrima, pero supuso que estaba sufriendo y para alguien que había sido criada por una mujer que anteponía la lógica a los sentimientos, debía ser tremendamente difícil poder expresarse abiertamente.

—Adelante, puedes llorar —dijo John abrazando a la niña. Ésta negó con la cabeza, pero se dejó hacer.

Sherlock ingresó a la sala, contemplando la escena; le hizo falta menos de dos segundos para saber lo que le sucedía a su hija y decidir actuar.

—Lestrade llamó, tiene diez víctimas de homicidio, el asesino les sacó los órganos.

—Sherlock —lo reprendió John, odiaba lo insensible que podía llegar a ser su novio, especialmente con la niña.

La nueva familia de papáDonde viven las historias. Descúbrelo ahora