Parte VII

2.6K 14 1
                                    

121.     El culto a la racionalización te convertirá en una especie de computador. El amor será una partida de ajedrez o un problema que se debe resolver

122.     El culto al autocontrol, temerás tanto excederte, que te olvidaras de sentir y gozar

123.     El culto a la modestia te llevara a no valorar tus éxitos y esfuerzos. Terminaras negándote a ti mismo.

124.     El culto al ahorro te impedirá darte gustos. Creerás que el dinero es un fin en sí mismo y no un medio para autorrecompensarte.

125.     Que tu autocontrol te permita una cana al aire, que tu presupuesto se salga de vez en cuando de lo previsto, etc.

126.     Quererte a ti mismo es contemplarte, cuidarte y expresarte amor de manera responsable, buscando tu crecimiento personal y no tu ruina.

127.     No exigirte es tan malo como sobre exigirte

128.     Si no posees metas o son demasiado diminutas, tu ego será raquítico y frágil

129.     Si no enfrentas los problemas y no peleas para alcanzar tus metas, tu ego morirá de inanición o se atrofiara. No lo dejaras crecer.

130.  Si desconfías de ti, no podrás amarte

131.  Si no tienes confianza en ti mismo;  tus retos personales serán pobres, evitaras enfrentar los problemas. Lo que bajara  tus metas y autoexigencias

132.  “Para que, yo sé  que me va a ir mal”. El pesimismo es la guía de las personas inseguras.

133.  Si decides arriesgarte a enfrentar los problemas. Lo que jamás debes perder es tu capacidad de lucha. Como decía Hermann Hesse: “Para que pueda surgir lo posible, es preciso intentar lo imposible”

134.  Si todo lo pones fuera de ti, no podrás tenerte confianza.

135.  Si crees en Dios, piensa en él como un asesor o como un padre que respeta la libertad de sus hijos. Si crees en los astros, piensa que ellos se equivocan demasiado, si tu horóscopo ha salido “malo” desafíalo. Las cosas dependen de ti más de lo que tú crees.

136.  “Los fantasma asustan más de lejos que de cerca”. Eso es la verdad. La única manera de vencer el miedo es enfrentándolo.

137.  La mayoría de las veces optamos por el camino más fácil: el alivio que nos produce la evitación y la postergación.

138.  Enfrentarse a cosas desagradables es incomodo, pero es el precio para modificarlas y vencerlas.

139.  Enfréntate a lo que temes aceptando que debes pagar el costo de sentirte mal un instante.

140.  Si te tratas mal y eres irrespetuoso contigo mismo, tu dialogo obrara como un freno. Elimina de tu repertorio el “no soy capaz”. Cada vez que te lo repites confirmas tu inseguridad. Esta calificación negativa, te inmoviliza.

Extractos de Walter RisoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora