NUEVOS SENTIMIENTOS (SAIKI KUSUO)

#9

Narra Saiki Kusuo

Desperte de golpe al sentir la presencia de Reita cerca de mi casa ¿Tal vez a una cuadra de esta? Busque con prisa mi celular para ver la hora, 4:57 de la madrugada. Me sorprendí por lo temprano que era y a la vez me preocupe de que el estupido de Reita este caminando solo en la calle a esta hora, ni siquiera amanecia, y todos sabian que no era seguro salir con tal oscuridad y a esta hora, mas si estabas solo. Con enfado me sente en mi cama restregandome los ojos.

««¿Que mierda haces?»»

Pregunte telepaticamente.

«¿Saiki? De hace dias que no me hablabas telepaticamente»

Respondio con voz de felicidad y algo de frio.

««como sea, responde que haces aqui»»

«te lo dije ayer, no pienso dejarte solo con el lunatico de tu hermano, no me da confianza»

Lo escuche hablar con una seriedad que me incomodo un poco.

««ah»»

Fue lo unico que pude decir, ya que aun no me creia que este estuviese hablando enserio ayer sobre venir cada que tuviese que ''jugar'' como le gustaba decirle a Kusuke a nuestros entrenamientos. Aun asi, mas que sorprendido por ello, estaba confundido, ya que mi estomago comenzo a dar vueltas apenas desperte por la presencia de Reita, y ahora que sabia los motivos de su visita, sentia mi rostro arder y mi corazon latir demasiado rapido. Definitivamente algo andaba mal.

«¿Saiki, aun puedes oirme telepaticamente?»

Escuche decir a Reita con la voz temblorosa.

««S-Si»»

Dije nervioso.

«¿Podrias abrirme la puerta? Esta demasiado helado aqui afuera»

La voz entre divertida, temblorosa y timida de Reita me hizo sacar una pequeña sonrisa que de inmediato borre para levantarme de mi cama y ponerme un pantalon de pijama, ya que suelo dormir con solo una camiseta y boxer. Me puse tambien un sueter ya que se notaba que afuera estaba helado, y me teletransporte a la entrada de mi casa.

Abri la puerta y lo vi con los pantalones y zapatos del instituto y una enorme cazaca de color negro con pelos cafes en el gorro y una bolsa colgando del hombro. Este venia con el gorro puesto y apenas pude verle el rostro, tiritaba y se abrazaba a si mismo.

Me corri para que Reita pasara, pero apenas moverme un poco, senti como este entraba y me apegaba a su cuerpo abrazandome con una mano por los hombros mientras con la otra cerraba la puerta.

Senti su olor envolverme, olia a vainilla, detergente y jabon, era demasiado agradable la combinación de aquello.

Lo senti temblar mientras me apegaba mas a su cuerpo y me abrazaba ahora con los dos brazos  inpidiendo moverme.

Tenia mi rostro sonrojado a mas no poder, me ardian con fuerza las mejillas y sentia como mi corazon latia como un loco. Mi estómago daba vueltas y sentia mi cuerpo mas debil, como si flotara en aquellos brazos. No sabia que hacer, estaba demasiado nervioso, nunca habia recibido un abrazo en mi vida a no ser que haya sido de mi familia. Esto era nuevo para mi.

Habia bajado la guardia y ahora era un manojo de nervios. Queria separarme de Reita, pero sabia que apenas tocarlo, mi fuerza lo mandaria a volar tal vez matandolo al instante.

Siempre que estaba nervioso, o sentia alguna emocion fuerte en particular, mis poderes se alocaban aumentando por completo. Basicamente al sentir cualquier emoción grande, era equivalente a quitarme un limitador de mi cabeza, tenia el mismo efecto, no controlaba bien mis poderes y todo era un caos, es por eso que siempre era neutro, no me permitia sentir emociones ademas de la muy ligera felicidad, que ya sabia controlar.