❝ Un amor explosivo ❞ ⌇⚣⌇ 〖Kiribaku〗

cap12.

Soltó un suspiro. -Está bien, voy a aceptar tu ayuda, pero solamente por esta vez.- se cruzó de brazos apoyándose en ambas muletas y dirigió su mirada nuevamente a los regalos.

Todoroki sin más comenzó a tomar varios regalos a la vez, para subirlos a la habitación del otro. Hizo tres o cuatro viajes, ya que los había separado en cómo estaban empacados. El único regalo que quedaba era el oso gigante que le habían dado entre todos.

-Este... Este déjamelo a mí.- dijo con unas sonrisa dulce, mientras lo tomaba entre sus dos muletas.

-¿Vas a poder solo?- Denki lo miró preocupado al verlo intentar caminar con el oso en brazos.

-S-sí, puedo.- avanzó con algunos problemas, no tantos, pero al menos pudo llegar a su habitación.

Los chicos siempre estuvieron detrás de él por cualquier cosa, y más por si se caía o si le sucedía algo parecido.

Al ratito de llegar a la habitación se despidieron de él y le desearon una linda noche. Midoriya le dijo que si precisaba algo lo llamara, sin importar la hora que fuese, Kiri aceptó sin muchas ganas, pensaba dejar a su amigo descansar sin ninguna interrupción.

Kirishima quedó solo en la habitación junto a todos sus regalos.

-Uf... Bien, vamos a comenzar a abrir estos regalos.- tomó las bolsas que estaban cerradas y comenzó a abrir cada uno.

Habían todo tipos de regalos, uno era un reloj rojo, le combinaba a la perfección, luego una nueva funda de celular, y otros objetos más que le habían gustado mucho.
Después de abrir el último regalo sonrió dejándolo junto a los demás y los miró a todos.

Dirigió su mirada hacia la carta grande que le habían escrito entre todos y se dispuso a leerla.

Era una carta simple, pero bien decorada, tenía algunas fotos pegadas también, estas eran o de él solo, con amigos o con Bakugou.

Sonrió levemente mirando cada una de esas fotos, como si se acordara de cuál era el origen de la foto o simplemente lo sucedido antes de esta.

Al terminar de leer esa carta llena de hermosos sentimientos y palabras, miró nuevamente los regalos. Soltó un suspiro pesado, estaba alegre. Alegre de tener ese tipo de amigos con él. Alegre de que no lo dejaran solo aún sabiendo que no se acordaba de todos... Simplemente estaba alegre de compartir su tiempo y emociones con ellos.

Tomó sus muletas y acomodó los regalos en sus respectivos lugares. Estaba dispuesto a tirar las bolsas grandes que estaban vacías, pero sintió que en una de ellas aún había peso. Se sentó despacio en el suelo y se metió de lleno en la bolsa para buscar el objeto o lo que sea que haya quedado dentro.
Lo agarró entre sus manos y salió de la bolsa mirando un intento de embalaje.

-¿Mh?

Lo observó atentamente, parecía un regalo mal envuelto. Lo abrió con cuidado, tenía miedo de llegar a romper lo que estuviera dentro. Al terminar de abrirlo vio un pendrive. "¿Qué? ¿Y esto?" Se preguntó el muchacho mirándolo de todos los ángulos posibles.

Era un pendrive con una pequeña nota mal escrita, no se entendía mucho lo que decía, estaba escrito bruscamente y pareciera que realmente no querían que supiera quién había sido.

El muchacho rápidamente tomó la computadora y se dispuso a conectar el pendrive, entró a una carpeta que este tenía.

-Wow...- exclamó mirando un montón de fotos y videos de él mismo, pero no estaba solo, casi siempre salían sus amigos con él o aquel tal "Bakugou", sentía que lo conocía, lo hacía... Solamente que no lo recordaba. Al ver estas fotos comenzó a sollozar y a pedir perdón en voz baja, no se acordaba de aquel rubio ceniza que tanto apreciaba cuando tenía memoria. Sentía que algo le faltaba. Estaba angustiado y no pudo parar de llorar. Se quedó dormido abrazando la computadora con las fotos de todo su grupito de amigos.

Al día siguiente se levantó por la alarma que sonaba a su lado. Miró a su alrededor y notó la computadora en el suelo, rápidamente la tomó y se fijó si estaba con algo roto, pero no, estaba en perfecto estado.
Soltó un suspiro suave. Dejó el computador encima de su escritorio y se dispuso a vestir.

Rió levemente tomando su móvil y abriendo una conversación de WhatsApp. Mina le había enviado un audio.

-"Hey, pelirrojo, espero que podamos encontrarnos hoy luego de clases, pensaba ir a comer contigo, quiero hablar unas cosas sobre algo importante, espero que no te moleste".

No le molestaba en lo absoluto, es más, le parecía una grandiosa idea para mostrarle el pendrive que le habían dado y preguntarle si sabía quién se lo podría haber dejado ahí. Le respondió mientras se colocaba la chaqueta del uniforme. Casi al instante le llegó otro audio de su amiga.

-"Bien, te esperaré en el patio ahora mismo para irnos juntos al instituto, apúrate, ya casi estoy terminando de arreglarme. ¡Dentro de un ratito nos vemos!"

Kirishima sonriente solamente respondió con un "Está bien, ahora nos vemos" y se desconectó rápidamente para poder hacerse la corbata.

Tomó su mochila que se encontraba encima de su cama y salió lo más rápido que pudo con sus dos muletas en cada mano.

-¡Hey! ¡Kirishima! ¡Estoy aquí!- gritó entusiasmada Mina mientras movía frenéticamente los brazos de un lado a otro.

El pelirrojo rió bajando las escaleras y dándole un abrazo de saludo. -¿Vamos?- Dicho esto ambos salieron caminando a la dirección del instituto.

-Tengo una duda... ¿Te gusta la comida japonesa?- preguntó sonriente la muchacha.

-Eh, sí, ¡Me encanta!, ¿por qué?

-No es nada, no es nada.- sonrió sospechosamente o al menos así lo veía Kirishima.

-Más te vale que no sea nada.- rió divertido y siguieron su rumbo.

Por otro lado, Kyoka y Bakugou estaban en la clase hablando de temas sin sentido, Uraraka estaba escuchando todo y de vez en cuando daba su punto de vista. Esto le molestaba al rubio, pero no hacía nada al respecto.

Desde la última vez que Jiro y él se encontraron en la sala de entrenamiento, el gimnasio Gamma (E.M.E.E), se volvieron algo más cercanos, nada del otro mundo, al final de cuentas son mejores amigos y Bakugou precisa un poco de apoyo para poder afrontar todo lo que está sucediendo.

Rápidamente llegaron a su destino, colocaron las cosas en sus asientos y se pusieron a hablar de temas irrelevantes mientras Iida le daba órdenes a Denki por no sentarse correctamente.

Sero miraba a Mina y a Kirishima parlotear. Era divertido. Midoriya estaba intentando calmar a su amigo de lentes, pero cualquiera de sus intentos eran inútiles.

-Bueno chicos, como ya se pudieron dar cuenta, Kirishima volvió a la clase y espero que le hayan dado un apoyo adecuado a su compañero.- Dijo Aizawa apoyándose en su escritorio y mirando a cada uno de sus alumnos. -No olviden que hoy es el entrenamiento especial que deberán hacer junto a All Might...- posó su mirada en el pelirrojo. -Tú no podrás hacerlo, pero puedes ir a observar si gustas, dicho esto, empecemos con la clase.

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¡Muchísimas gracias por los 2.5k!, Realmente les agradezco todo el apoyo que le están dando a esta historia y por seguir apoyándome aunque no suba el contenido muy seguido. Es bonito.
¿Les gustaría que hiciese algo especial?, Siento que les debo mucho.

Comencé las clases apenas el miércoles de la semana pasada y ya estoy exhausto, ¿Y ustedes? ¿Cómo les ha ido este comienzo de clases?
Saben que cualquier duda o cosa que deseen decirme estoy acá.
No se olviden de seguir votando, comentando y haciéndome saber que quieren más partes.
Síganme, pienso subir otra historia o una mini historia sobre el ship kiribaku de algo que me inspiró cuando estaba viendo unos videos.

Gracias por todo. Los quiero.♡
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Tim.