Rivales • YulYen

Capitulo 22

Septiembre.

Un largo verano, sesenta y dos días en la cuales se había divertido con sus amigas, y como no, Jo Yuri había irrumpido en sus pensamientos cada vez que podía, ósea, casi todo el tiempo.

Yena había planeado olvidarla, pero, ¿cómo hacerlo? Solo podía pensar en su beso, la atormentaba todos los días y en las noches soñaba con él. Sus labios, su sabor, su tacto, todo seguía en su memoria y lo añoraba aún más, fue tanto así que incluso volvió a teñirse el cabello nuevamente junto Minju y Ryujin quien dejaron su hermoso cabello de antes de lado por uno pelirosa, a Minju siempre le había gustado ese color y quiso intentarlo y Ryujin solo para joder a su amiga se lo tiño del mismo color, lo único que les diferenciaba era que Minju lo seguía teniendo largo y Ryujin hasta sus hombros. Y en cambio Yena decidió ir por el antiguo camino de su amiga y el de Yuri, a ella le agradaba bastante como le quedaba el castaño, recordando los primeros días de conocer a Yuri ella solía tener es color de cabello antes de cambiarlo al anaranjado.

Dios Choi Yena, es que tú te mereces el premio de la más idiota al estar tan colada por Jo Yuri, cada cosa la recordada a ella, por más que la intentase olvidar, de alguna manera quedaba más enganchada en la bajita. Ella podía jurar que hubo algo más especial en ese beso, pero sus amigas siempre le recordaban que Yuri tenía novio y que, en todo caso, estaba jugando con ella.

Yena sabía que tenían razón, pero, la forma en que Yuri la había besado, era diferente. Igual le alegraba que ahora su amiga Minju no pudiese reñirla, ya que ella también estaba colada por la capitana del grupo de las plástico, Chaewon.

Cuando alguna de las dos caía en depresión siempre se consolaban entre ellas. Minju durante el verano lloró varias veces y pasó la noche en casa de Yena, las dos juntas mirando películas románticas y comiendo helado mientras se abrazaban. Yena amaba a Minju y Minju a ella, sufrir de amor por unas idiotas había fortalecido aún más su amistad. Chaeyeon lamentaba el momento en que sus tres amigas cayeron rendidas por unos idiotas, Ryujin no podía parar de hablar de Yuna tampoco.

Estaban en el carro de Jaemin, hablando tranquilamente, y listas para su primer día de clases. Minju estaba nerviosa, pero tenía en claro que iba a ignorar rotundamente a Chaewon. Se pasaba las manos por su rosado cabello, tirándolo hacia atrás varias veces.

-Te apuesto que al final del día, está hablando con ella- Le dijo Ryujin a Chaeyeon y las dos apostaron.

-Pues perderán, no le voy a hablar. Está decidido, la superaré a como dé lugar- Dijo Minju muy decidida desde el asiento trasero, junto a Yena, Ryujin estaba de copiloto con su hermano.

-Descuida, chica. Cuando tú superes a la rojita, será el mismo día que Yena deje de babear por Jo- Dijo alegremente Jaemin, causando las risas de su hermana y Chaeyeon, las otras dos no estaban muy felices.

Yena bufó, frustrada. Ella también tenía su lucha interna, ya que después de dos meses del beso compartido con Yuri, la iba a volver a ver. No estaba segura de sí la bajita actuaría como si nunca hubiese ocurrido o se vengaría de ella, haciéndole la vida imposible. Llegaron hasta el estacionamiento y se bajaron del coche. Minju dio un portazo, aún furiosa, mientras sus amigas se reían de su reacción.

-Vamos, Minguri. No te enojes- Le decía Chaeyeon colgándose de su cuello y Minju la ignoró.

-Yena Unnie, ¿vamos entrando?- Preguntó a su amiga con una cálida sonrisa, ignorando por completo a Chaeyeon, quien chillaba.

-Claro- Respondió Yena y los cinco comenzaron a caminar hasta la puerta.

Ahora, Yena tenía dieciséis años y estaba lista para superar este año escolar, pero para lo que aún no estaba preparada, era para Yuri.