La Decisión

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Durante el resto del día, Erika y Chrome se encontraban en sus respectivas habitaciones, sus familiares no los dejaron solos, sabían la tristeza de sus compañeros. Aunque por una parte, la castaña observaba la llave de la casa de Grad, pensaba que hacer con la casa, cuando llamaron a su puerta.

- ¿Erika?

- Adelante, hola Ykhar

- ¿Cómo te sientes?

- Nada bien - suspiro - aunque lo conocí poco, el señor Grad fue muy bueno conmigo

- Kero me conto que te heredó su casa - la castaña asintió - ¿Qué harás con ella?

- No lo sé aún, excepto que si la alquilo, pediré como condición que el jardín se quede intacto, se me permita visitarlo y que Phenril siga viviendo ahí

- Será un poco difícil encontrar personas que te dejen hacerlo - al ver a la chica pensativa - ¿Erika?

- Ya veré como lo resuelvo, bueno, es hora de la cena

- Cierto, Karuto me mandó por ti y Chrome, no quiere que se pierdan su especialidad

- Ya voy - sonriendo - gracias

- De nada, por cierto Erika...

- Dime

- Tú y Valkyon... ¿Cómo van en su relación?

- ¿Relación?, ¿te refieres a jefe y guardiana?

- S-si

- Pues muy mal - poniéndose de pie - aun duda si merezco estar en Obsidiana

- Ya veo, pero él no lo hace

- Vamos a cenar Ykhar

La chica conejo solo asintió para seguir a Erika, quien le pidió adelantarse para ir por Chrome, pero el chico no se encontraba en su cuarto, así que ella decidió volver a la cantina por la cena. Pero al pasar por la habitación de Miiko

- Nevra, Ezarel, hoy si se pasaron de tontos, miren que decirle eso a Erika

- Solo fue una broma, ya te lo dije - se excusó Ezarel - además, tú tampoco estás exento Valkyon

- No olvides que tu sugeriste que tal vez uso una poción para mejorar en los entrenamientos

- No me lo recuerdes Nevra - bufo el peli plata - pero tenía que hacerlo, sabes que yo

- No importa ya - interrumpió Miiko - ahora que el señor Grad a fallecido, veremos si realmente Erika ha mejorado por si misma sin usar alquimia. También hay que vigilarla todos los días, a ella y a Chrome

- ¿Quién está ahí? - Leiftan salió de la habitación, pero al ver que no había nadie

- ¿Qué paso?

- Nada, estoy imaginando cosas

Por su parte, Erika caminaba furiosa hacia la cantina, trataba de contener el llanto, cuando choco con Kero

- Erika, ¿Qué pasa?

- Odio este lugar, los odio a todos

- Cálmate - sujetando sus hombros - dime, que sucedió

Kero la llevó a la cantina, donde en una mesa, Chrome, Alajea, Karenn e Ykhar los esperaban

- Erika, ¿qué pasó?

MothraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora