Mothra

Ghidorah

Había llevado los cadáveres de familiares grandes, para el eran solo pequeños bocadillos. Su invocador solo lo miraba con una sonrisa, mientras comía lo que quedaba en la bodega.

- Solo están comiendo

- ¿Y el cristal?

- Solo veo una enorme bola de seda. La guardia de Eel no hizo bien su trabajo

- No importa, a mi señal atacan

Una sonrisa se dibujó en el rostro del oji azul

- Ghidorah, ¿aun tienes hambre?

Un fuerte rugido se escuchó seguido de gritos de faericos electrocutados por los rayos gravitacionales. Pero aún quedaba uno vivo, mismo que Lance intercepto

- Oh... reconozco este escudo - riendo, Ichi se acerca - no, dejémoslo ir, necesitamos un mensajero

En la aldea de los kappas, Valkyon se encontraba en la playa, buscando que alguno de los barcos estuviera intacto, pero era en vano. Eso lo frustraba, necesitaba volver al refugio, al mismo tiempo que recordó la imagen de Erika sonriéndole

- Valkyon... perdóname

- Erika... - apretando sus puños – Erika...

A su mente llegaron los momentos que convivió con la joven, en especial aquella tarde bajo el cerezo, donde él se quedó dormido a causa de la melodía de Mothra pero también, el recuerdo de su pesadilla, donde ella era devorada por unas fauces negras, ahora entendía que se trataba de una advertencia.

Lanzó un grito de frustración, sin darse cuenta que era observado por el maestro Kappa. Este espero a que Valkyon se calmara, hasta que finalmente se acercó al joven

- ¿Estás bien?

- ¿Cómo voy a estarlo?... mi hermano estaba vivo y resulto que era nuestro enemigo... y Erika... ella... - sintiendo la mano de la tortuga

- Entiendo, pero ella es cuando más te necesita en este momento

- ¿Cómo?, dígame cómo

- Ven conmigo, hay algo que quiero mostrarte - dándole una mochila

- Pero - viéndolo confundido

- Tú debes ser el primero, Miiko ya está al tanto de este viaje

Valkyon vio como dos grifos se acercaban a ellos, ya con las sillas de montar puestas. Luego de ayudar al maestro a subir y hacer lo mismo, emprendiendo el vuelo. El viaje duro dos días, al llegar, la vieja tortuga lo guio hasta un lago

- ¿Qué es este lugar?

- Es el Lago Esmeralda, tomemos un poco de esta agua. Después, entraremos en la arboleda que está cerca de ese lago para recoger leña y al final, llegaremos al Torii de los Recuerdos

Luego de que lo hicieron, finalmente llegaron a su destino, el Torii de los Recuerdos, el cual era un santuario para los habitantes de las Tierras de Jade. Valkyon estaba impresionado al mismo tiempo que sentía una calma inexplicable, incluso los grifos lucían relajados.

- Maestro...

- Sígueme, pero antes, dejemos la ofrenda

Valkyon asintió: la ofrenda consistía en diversas frutas de Eldarya, así como flores y por supuesto, el agua del Lago Esmeralda. Mientras el moreno encendía incienso

- Sabios espíritus que habitan este lugar desde el Gran Exilio - tomando aire - Ghidorah ha ingresado a nuestro mundo, permítanme mostrarle a este faery - refiriéndose a Valkyon - quien es La Muerte Dorada