XIX: The Barton's

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POV Natasha

Después de muchos abrazos y de explicar lo que había pasado detalladamente todos nos sentamos a cenar en família.

- Bueno, ¿qué habéis hecho durante todo este tiempo?- pregunté mientras metía un trozo de tomate en mi boca.

- No mucho,-empezó Clint- cuidar de la granja y de los niños.

- No olvides llorar a Tía Nat.-dijo Lila, que adoptó la personalidad directa y con poco tacto después de pasar mucho tiempo con Natasha cuando era pequeña.

- Y cargarte la mitad de la casa.- la apoyó Laura.

- Espera, ¿qué?- preguntó sorprendido Steve uniéndose a la conversación.

- Eh, eso fue culpa de Lila.- se defendió Clint.

- Tu fuiste el que tuvo la idea de enseñarle a usar el arco, cariño.

- Pero fue ella la que cambió las flechas normales por las explosivas.-siguió discutiendo la pareja.

- Fuiste tú quién dejó las otras muy a la vista y no me dijo que eran explosivas, papá.- se metió la joven con una sonrisa traviesa.

- Oh, veo que esto es un complot contra mí.- Clint se hizo el ofendido mientras las dos mujeres de su vida chocaban las manos. - Chicos, ¿No vais a ayudar a vuestro padre en esto?- preguntó Clint a sus otros dos hijos, Cooper y Nathaniel, que se hacían los desentendidos; como si su plato de ensalada fuera lo más interesante del mundo.

- No nos conviene tener a mamá en nuestra contra.- habló Cooper.

Clint se cruzó de brazos y se puso de morros como un niño pequeño a lo que todos estallamos en carcajadas.

En estos momentos me sentía más feliz; como si todo mi pasado se desdibujara en finas líneas hasta desaparecer. Como si la Sala y la KGB nunca hubieran existido. Como si nunca me hubieran roto.

Steve vió mi cambio de expresión y me preguntó con la mirada que qué me pasaba pero yo solo negué y le sonreí.

No me pasa nada.- hice con mis labios.

De repente, me di cuenta de que esa era probablemente la primera vez que no mentía al afirmar que estaba bien.

Un bostezo del pequeño Nathaniel interrumpió nuestra silenciosa conversación.

- Bueno creo que ya va siendo hora de que alguien se vaya a dormir.-dije cariñosamente al más pequeño.

- ¿Puede arroparme el tío Steve?- dijo adorablemente mientras se rascaba los párpados en un intento de seguir despierto.

- ¿Eh? Yo... No sé cóm-- empezó a hablar atropelladamente Steve sonrojándose por completo.

- Vamos tío Steve, ¿No tendrás miedo de un niño?- me burlé de él.

Él se armó de valor y elevó al pequeño, que apoyó su cabeza en su hombro cerrando sus ojos al instante.

Guié a Steve hasta la habitación del pequeño y me apoyé en el marco de la puerta viendo como arropaba al niño con delicadeza.

Cuando Steve estaba a punto de irse Nathaniel volvió a abrir los ojos.

- ¿Se va a casar usted con la tía Nat , tío Steve?- preguntó sin tapujos a lo que Steve se sonrojó.

- ¿Es por eso que no ha venido hasta ahora y papá lloraba tanto?, ¿Porque ustedes se van a casar? o ¿es que usted le ha puesto un bebé en la barriga a la tía Nat?- siguió el pequeño, a lo que Steve decidió por la ruta de huída más cercana:

- Te lo contaré cuando seas mayor, pequeñín.

Cuando Steve estaba ya por irse, el niño dijo una última cosa.

- Gracias por cuidar a tía Nat, se la ve mucho más feliz contigo tio Steve.

Steve y yo nos miramos y le sonreímos tiernamente antes de apagar la luz y cerrar la puerta.

Cuando bajamos, ya no quedaban niños despiertos y Clint y Laura compartían las últimas gotas de una botella de vino.

- ¡Eh, os lo habéis bebido todo!- dije.

- No te creas;-habló Clint mientras Laura sacaba unas diez botellas de licores variados.-Aún nos queda todo un arsenal.

Acabo de volver de estar acampando tres días en la cola del concierto de Billie Eilish en mi ciudad y creo que sería justo considerarlos tres de los mejores días de mi vida.

- A

La viuda negra  (Romanogers) - ENDGAME ALTERNATIVODonde viven las historias. Descúbrelo ahora