Celia's POV.
Me sientía mejor. A veces, creía oir la voz de mi familia a mi alrededor pero no estaba segura.
- Bien... Jaime, ¿no?
- Sí.
- Tú hermana se va a poner bien, tendría que despertarse en poco tiempo, es posible que hoy mismo, pero eso en estos casos nunca se sabe. Le hemos hecho un tac y no hemos encontrado nada extraño, nada de relevancia. Probablemente se desmayo por la presión, de...de todo lo que ha debido de pasar en este tiempo... Y bueno, eso es todo.
- Gracias doctor.
- Adam, por favor.
- Gracias Adam.
Oí como la puerta se cerró, y alguien me agarró la mano.
- Hermanita te vas a poner bien, ¿lo has oido no?
Se hizo el silencio, y notaba como mi mano se empapa, me mataba la curiosidad por saber que era ese líquido.
Abrí un ojo, y luego el otro. Ví como mi hermano lloraba agarrandome la mano, y como empapaba mi mano, mi brazo, y mi camilla.
- No llores estoy bien... - dije con una voz suave y lenta, me contaba hablar.
Mi hermano, levantó la cabeza y me miró, se quedó perplejo unos segundos y luego reaccionó abrazandome fuerte contra él.
Jaime's POV.
Salí de la habitación esperando a que mi hermana terminara de vestirse, y la esperé en el pasillo con el proposito de esperarla, la habían dado el alta.Se abrió la puerta y salió, mi madre, mi padre y mi hermano pequeño corrieron hacia ella emocionados, y yo me quedé a un lado, mirando.
Cuando terminaron ese momento tan familiar...hablaron, mis padres pusieron mala cara y me miraron... yo me preguntaba que les habría dicho Celia. Mi hermana se dirigió hacia mi.
- Jaime, ¿puedo vivir contigo?
Me quedé perplejo, y a la vez emocionado.
- Sí, claro.
Mi hermana sonrió ampliamente, y dirigió la mirada a mis padres, y asintió, ellos fingieron alegrarse.
Salimos de aquel sitio, el hospital, y nos dirigimos a mi antigua casa, en la que viví con mis padres. Mi hermana entró seguida de mi hermano y mi madre, pero mi padre se quedó fuera, conmigo.
- Mm... Jaime...
- ¿Si?
- Cuidala, por favor, cuidala.
- No te preocupes, ya no fumo... ya sabes...
Mi padre no articuló palabra alguna, y se metio dentro.
Yo fui a mi coche y esperé hasta que ví a mi hermana con dos maletas y una mochila, juraría que casi grito. Hice maniobras en el maletero para que cupieran todas sus cosas en el maletero, pero entraron todas.
La lleve a casa, nuestra casa.
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Amor de hermanos.
Teen FictionNo hay nada que quiera hacer sin él, les ayudaremos si la historia se repite.