X

768 159 26
                                    

Hooola Nuevo capítulo 🙋

Me gustaría saber qué piensan de la historia hasta ahora ➡️➡️

Disfrútenlo y si ven errores, avisen.

.
.
.
.
.

—Levi... Levi...

La mano que acariciaba su cabello era tan cálida que no quería abrir los ojos, se removió un poco y murmuró algo incomprensible, escuchó una risita ahogada y lentamente tuvo que volver a la realidad.

—¡Señor Ackerman me hace cosquillas!

Levi levantó su cabeza sobresaltado, se había quedado dormido sobre el abdomen del muchacho, un poco avergonzado observó a Eren que lo observaba con una sonrisa radiante, tenía el cabello revuelto y la ropa que llevaba estaba toda arrugada.

—Lo siento, parece que me he dormido—. Miró por encima de su hombro y luego preguntó —¿Qué hora es?

—Las seis y media, aún tiene tiempo para prepararse para la escuela.

Eren se sentó en el sillón y luego con pesadez se levantó.

—¿Levi dónde está el baño?

—Por allí— señaló la puerta y luego inquirió —¿Te encuentras bien?

—Perfectamente señor.

Eren tomó su ropa que ya se encontraba seca y estaba colgada sobre una de las sillas y se dirigió tranquilamente hacia el cuarto de baño. Levi se levantó de la silla y fue hacia la cocina y puso un poco de agua a calentar, buscó unos saquitos de té y preparó dos tazas.
Cuando Eren salió del baño y llegó a su lado, le dejó a su cuidado el agua que estaba calentándose y él mismo fue para asearse.

Minutos después ya ambos se encontraban en la mesa disfrutando de un pequeño desayuno.

—Lamento las molestias causadas Levi.

—No molestas, ya lo he dicho antes, puedes venir cuando quieras— hizo una pausa y luego continuó —, la verdad es que no conozco a nadie y tu compañía no es mala para mí, así que está bien.

Eren sonrió y luego pareció recordar algo importante, el reloj marcaba ya las siete y veinte de la mañana, así que cuando ambos terminaron de comer, levantó las tazas y demás y las llevó al pequeño fregadero para lavarlos.

—Debo pasar por mi casa para ponerme el uniforme.

Levi terminaba de colocarse el saco y guardar unas libretas, asintió y ambos caminaron hacia la puerta de entrada. El azabache quedó estático cuando observó la madera desde el exterior. Grandes rasguños marcaban la entrada de su morada, sin embargo el castaño lo sacó de su trance al apoyar su mano sobre uno de sus hombros.

—Hizo bien en no dejarlas entrar, vamos, se hará tarde.

Levi terminó por cerrar la puerta y caminar junto al castaño, cuando fueron metiéndose entre las casas se encontraron con una gran multitud, en un momento a otro ambos se miraron y luego comenzaron a adentrarse en ella, Levi bastante incómodo por aquellos ojos inquisidores que parecían juzgarlos, algunos se veían más sorprendidos y otros temerosos, Eren por su parte estaba bastante alterado y no necesitó abrirse el paso para llegar hasta su hogar, las personas se alejaban de él apenas entraban en contacto y pronto el azabache vio como corría hacia una de las casas.

—¡Mamá, mamá!

Grisha estaba afuera, sus ojos rojos y sus mejillas mojadas, al oír a su hijo se fue hacia él con una furia incontenible.

—¡Es tu culpa! ¡Todo es tu culpa!

Levi tuvo que ponerse en su camino para detener el golpe que el hombre estaba a punto de propinarle. Grisha dio un paso hacia atrás y luego lo señaló.

—¡Todo es culpa de ustedes! ¡Los forasteros hicieron que ellas volvieran!— luego dio otro paso hacia atrás y rompió en llanto —No los quiero cerca de aquí, aléjense de mi hogar, ustedes están malditos.

Levi observó a Eren, la mirada del muchacho parecía perdida, sus ojos miraban hacia arriba de ellos, allí, Dina se balanceaba desde el balcón, se había ahorcado.

Campanas a Medianoche (Riren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora