Capitulo 20

17 2 0
                                    

   Es domingo. Todavía mamá, papá y Ringo duermen. Seguro se acostaron mas tarde que yo. Volví a la 1 y media y todavía no estaban. Al final me puse la blusa blanca, el pantalón azul y mamá, antes de irse, me pintó un poco los ojos. Llegamos más tarde, cuando ya había empezado porque pasamos a buscar a todas. Y Akane puede llegar a tardar mucho. Como 10 minutos esperándola para que nos vallamos , muertas de frío. Para colmo, vivimos todas re lejos. Hacía como un mes que no iba a bailar. Obviamente nada había cambiado mucho.

   Fuimos a tomar algo. Una coca. Y de paso nos dimos una vuelta para ver quien estaba y quién no: subimos y cuando bajamos, compramos las gaseosas. Adentro hacía mucho calor. Dejamos las camperas en el guardarropa, cosa que detesto porque al final todo el mundo se mata para salir rápido y las chicas se amontonan, todas histéricas, para buscar cada una su campera.

   Y después, otra vuelta. Y ahí lo vi a Ren charlando con una chica. El otro amigo con otra y ni rastros de Shiro. Ni los miré. En la escalera nos encontramos con Claude, el de 18. La estaba buscando a Keiko. Divino ese chico, tiene cara de buen tipo. O sea que Keiko se fue con él. Y nos quedamos las tres esperando que llegara la novia de Akane. No sé si conté que esta de novia con una amiga de AnimeAmino. Fuimos para arriba, miramos para abajo. La típica ronda eterna. En el momento en el que íbamos a bajar, lo vi a Shiro bailando en el medio de la pista, del amontonamiento, con una castaña de pelo largo. Solo veía eso desde arriba. Ni idea de quien era la castaña. Bajamos y nos sentamos al lado del baño, desde donde teníamos la mejor panorámica para descubrir a la Novia por si llegaba, y para mirar. Que es una de las cosas que más se hace cuando se va a bailar.

   La castaña era hermosa. Estaban al lado de los parlantes, a unos metros nomás, cerca de donde bailaban Clude y Keiko, que no paraban de charlar. Shiro y la castaña tampoco dejaron de charlar en todo el tiempo que estuve ahí sentada. Cuando llego la novia de Akane, la sacaron a bailar a Kaori y yo me quedé sola. Sola, lo que se dice sola, no porque Kaori, para no dejarme ahí, se puso a bailar a mi lado. Igual, a mí no me molesta estar sentada y odio el: "¿No tenés un amigo para mi amiga?". Mientras bailaban, pude ver a Shiro más de lo que lo vi toda mi vida. Tiene cara de hombre. Tiene rasgos duros. Ojos rasgados. Y aunque no se crea, desde donde estaba y cuando la luz me lo permitía, descubrí que tiene una cicatriz chiquita en el cuello. No es fea. La sonrisa enorme. Estaba re simpático con la castaña. Es muy caballero. Te das cuenta al toque que lo ves. Es serio. Tanto lo miré que me vio. Me sonrió y me saludó con la mano. Le devolví el saludo y la castaña se dio vuelta y me miró intrigada.

   Cuando Kaori se cansó de bailar, nos fuimos a dar una vuelta y lo perdí de vista.

   No sé ni dónde se habría metido, ni quién era la morocha. A lo mejor tiene novia. Por eso no me escribe. La novia se puso re celosa de que me escribiera a mí pero ayer, cuando me conoció, se quedó tranquila, seguro. Al final, ni bailé. Y en el remís escuché las historias de las chicas. Yo estaba muy cansada como para contar algo.

Somos Así (Diario De Chicas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora