Capitulo 11

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  Hoy a la tarde me llamo Keiko al celular de mamá. Habíamos ido al club a almorzar con los tíos. Me llamó para decirme que había estado en el boliche con Ren y los chicos. Que estaba Shiro, y que le hablo a Ren y lo dejó del tamaño de una hormiga. Que le dijo de todo y delante de los amigos. Y que Keiko te diga de todo es algo humillante para cualquiera. Le dije a Keiko que se había re desubicado , que no soy una nena. Pero, en el fondo, me gusto que me defendiera. Me imagine la cara de Ren mirándola desencajado. Me dijo que la paso re bien, que volvió a bailar con el mismo chico de la otra vez. Es 3 años mayor. Keiko tiene 15; él, 18.

  Yo ni quería ir al club, todo bien con los tíos, pero estoy casi sin hablarme con mamá desde ayer. Solo me dijo esta mañana: "Seiren ¿No te pose poner otra cosa que esa calza y cambiarte el peinado para ir al club, no?". Ni espero que le contestara. Ni le contesté. El almuerzo estuvo silencioso. La tía se dio cuenta de todo. Y no dijo nada. Ringo estaba medio dormido, el tío charló mas con los conocidos que con la familia, y mamá se hacia la interesante. Siempre pienso que se hace la espléndida para conseguir clientes para el estudio, y amigas. Para sepultar eterna y definitivamente el vacío que dejó Maiko cuando se fue. Yo apenas abrí la boca. Todavía tenia la excusa del dolor de ovarios.

  Cuando subimos al auto del tío, la tía me dijo que después me llamaba para charlar. La vuelta fue más silenciosa que la ida. Mamá llegó a casa, y solo dijo que se iba al cine esa noche. Ringo me miro de reojo y me dijo: "Esta mujer no para". Y el también paró. Se fue a bailar con los chicos de la secu. Y otra vez con la casa solo para mí.

  Hoy estoy triste. las chicas: Keiko, Akane, Kaori y Saori iban a bailar a la noche. Me llamaron. Ni ganas que tenia de ir. Me veo horrible. Sí, al fin y al cabo tengo que felicitar a Ren. No por la forma de decirlo, pero es el único que dice la verdad, que estoy horrible. Parecerá muy frívolo y no me importa, pero me estoy dando cuenta de que no hay beneficios en este mundo para las mujeres de caderas anchas.

  No había nada bueno para ver en la tele. Encendí la radio y el celular. Hacía varios días que no revisaba Whatsapp. Mientras esperaba que se conectara al servidor, me fui a buscar un pedazo de torta que había quedado y me serví un té. Cuando volví, dejé las cosas en la mesa y descubrí que había dos mensajes nuevos. Uno era de Keiko, y el otro de Shiro.

  Me quede dura y un pedazo de torta se me atoró en la garganta. Abrí el de Keiko que decía textual:

"Seiricita, perdóname si te molesta que le haya pasado tu numero pero él quería hablar con vos. Te quiero. No me mates ;u;"

  Para colmo, "Seiricita". Lo hace a propósito, sabe que detesto que me digan "Seiricita", parece que se refiere a alguna droga.

  O sea que ella le había pasado mi dirección al amigo del imbécil.

  Abrí el de Shiro:

  "Seiren, por lo menos así no vas a insultarme. ¿Puedo saber como estás y por qué me trataste así? Shiro (El que te dejo la pulsera)"

  Como si conociera a 800.000 Shiros. Imprimí el mensaje y me quedé mirando como 10 minutos preguntándome qué hacía en mi celular. Estaba escrito a las 9.45 de la noche. Mire el reloj, 10.45. ¿Que estará haciendo en este momento Shiro?

  Seguramente se habría ido a bailar con el idiota. Al final junte coraje y después de decenas de tentativas le contesté:

  "Shiro, antes que nada gracias. No es agradable rodar por las escaleras cuando te están mirando varias personas que acaban de reírse de vos. Vos te reíste. Después me das la pulsera. No entendía nada, por eso te insulté."

  Lo mandé. Y ahora me arrepiento. Fui demasiado sincera y ahora me siento vulnerable, siempre me pasa lo mismo. Además, ni lo conozco al chico y ni se, de verdad no lo sé, si no me esta tomando el pelo. Pero es Sábado a la noche. Todos se divierten: Mamá, Ringo, Keiko, Kaori, Saori, Akane. Hasta los tíos deben haber ido al cine o se habrán juntado a jugar a las cartas con los vecinos del 7° "C". Todo el mundo con todo el mundo, menos yo. Me anime un segundo a mandar el mensaje porque pensé: "Total qué tiene, si ni le veo la cara". Pero luego de apretar la flechita y ver que volaba por el ciberespacio comprendo que ahora no le veo la cara pero el Lunes, Martes, Miércoles, Jueves y Viernes de la próxima semana y de la sucesivas semanas que falten hasta que me reciba, voy a tener que verlo. Ahora me siento peor. Seguro que me está tomando el pelo. Para colmo las chicas están bailando y no las puedo llamar para contarles y en este momento necesito charlar con alguien. Ya, necesito que alguien me haga compañía un rato. Estoy más que ansiosa. No hay nada rico para comer en la heladera. Me voy a ir a dormir aunque no pueda.

Somos Así (Diario De Chicas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora