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Jaebum había despertado en la enfermería, con una curita en su frente.

— Al fin despiertas, pensé que te habías muerto.

— ¿Qué fue lo que paso?

— Bueno... te tropesaste con alguien, quedaste inconsciente y te raspaste la frente, es algo normal en ti.

— ¿Y Youngjae?

— No lo he visto desde que te trajo junto con su amigo, que por cierto era muy pero muy lindo creo que me enamore.

— Genial ahora para Youngjae soy un tonto que no ve por donde camina.

— ¿Qué no ya lo eras?

— Ja, ja, que gracioso Hyunwoo.

Las pertas de la enfermería se abrieron bruscamente dejando ver a un Youngjae agitado.

— ¡Jaebummie!, ¿estas bien?

— Estoy bien Jae.

— Me asustaste, no pensé que tropesarte te dejaría inconsciente.

— Creeme, a él le ha pasado muchas cosas peores, por ejemplo ha tenido diarr-

— Si creo que ya entendió gracias Hyunwoo.

— De nada, los dejare solos ¡ah cierto! Youngjae ¿sabes donde puede estar tu amigo?

— ¿Kihyun?, creo que esta en el salón de música.

— Gracias y adiós.

— Creo que yo igual me tengo que ir.

— Quedate un poco más Jae, no quiero quedarme solito.

— Esta bien, además es mi ultima clase.




——— 🌙 ———




Jaebum y Youngjae se dirigían a la casa de el primer mencionado, ya que según Jaebum no quería ir solo y caerse otra vez.

En el trayecto a la casa del mayor Jaebum había pisado popó así que tenían que llegar rápido a su casa para poder limpiar su zapato.

— ¡Eran nuevos!, por eso prefiero a los gatos.

— Pero que no los gatos tam-

— Ahora tengo que lavarlo, ¡gracias!

Llegaron y para la suerte de Jaebum al intentar abrir las llaves se le calleron, luego de minutos buscándola la encontraron y pudieron abrir la puerta.

— Puedes sentarte en el sofá mientras yo limpio esto — alzo su zapato para poder ver si había pisado mucho o poco, pero al alzarlo pudo oler lo que había pisado — ¡buh! mala idea.

Después de que termino se sentó en el otro lado del sofá donde Youngjae estaba.

— Jae

— ¿Si?

— Antes de que me pasara todo esto, tenia que preguntarte una cosa, pero me caí y quede inconsciente casi una hora.

— No te preocupes bummie, ¿qué tenias que decirme?

— Yo... quería saber si tú... ¿querrías tener una cita conmigo? — susurró muy bajo, casi inaudible para Youngjae.

— ¿Encerio me lo estas pidiendo?

Asintió.

— ¡Si!, quiero decir si claro por que no

— estaría bien ¿mañana?

— Si, por mi esta bien

— Bien mañana a las...

— ¿6:00?

— Bien

— Bien — se levanto rápido del sofá agarrando su mochila también — ¡nos vemos mañana bummie!

Youngjae se puso de puntillas para plantarle un pequeño beso en su mejilla y se fue de ahí.

— Adiós.






¡holaaaaaa!

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