Molly, ¿Dónde estás? [PARTE II - ELS]

Capítulo 15

ANTES

Luego de pasar toda la tarde en Mimmo's decido partir. Admito que me fui muy satisfecho del bar. Frank me ayudó a programar un horario para ir y hacer mis practicas. El conoce mucha gente, y conoce profesionales que me ayudarán.

No tardo mucho en llegar. Pero si algo me toma por sorpresa es ver la casa a oscuras. Se supone que los padres de Rosie ya estarían a casa para esta hora. Pero evidentemente no es así. La puerta está abierta así que paso sin más. Parece estar completamente vacío el lugar hasta que voy al dormitorio. Y allí está, borracha.

— ¡Volviste! - grita con una botella de vodka en su mano. Con solo oler esa bebida me da nauseas, algo me dice que no era muy fanático del alcohol.

— ¿Qué está pasando? - Pregunto mientras veo a la chica saltando en su cama. Si continúa haciendo eso, devolverá todo.

Se detiene y lanza la botella al suelo. — ¿Acaso no soy atractiva?

— ¿Qué? ¿De qué hablas? - Está realmente borracha.

— No me besaste anoche. - Dice acercándose a mi. — ¿No soy tan linda como esa tal Molly? - Dice con desprecio en su tono.

<< Pues no >> Pienso en mis interiores. — No es eso, lo que sucede es que... - No logro terminar la frase que se lanza sobre mí. Sus labios son suaves pero el alcohol opaca su verdadero sabor. Intento apartarla de mí pero no lo hace. Me lanza a la cama y comienza a dar besos en el cuello. El olor al alcohol me supera y logro hacer que pare.

Se ve confundida. Está sobre mi regazo con poca ropa, pero con mucho alcohol en su sangre. Intento hablar lo más neutro posible aún teniéndola sobre mí. — Ro, eres hermosa en serio. Pero no eres ella. - Digo suspirando. No se como puede reaccionar ante esto, posiblemente me eche de aquí. — Oye, si quieres puedo ir a otro lugar. - Digo asumiendo lo que sucederá, no quiero irme, pero creo que a esta altura no hay otra opción.

— No, quédate. - Dice como si no estuviera borracha. Se sienta a mi lado y suspira. — Lo lamento, no quise...

— No te preocupes. - Suelto colocando mi mano sobre su hombro. El ambiente deja de ser tenso y no se como vuelvo a besarla. No pasa ni medio segundo y ya está de nuevo sobre mi. Se que está mal y que no debería pero no puedo parar de pensar en ella mientras beso a Rosie. Sus manos pasan por todo mi cuerpo y me permito, por unos minutos solamente... pensar que soy un adolescente normal.

No recuerdo mi primera vez. ¿Habré tenido una? De seguro no fue con Molly, creo que Frank dejó bien en claro que fuimos unos cobardes, así que dudo haberla siquiera besado. El techo de esta casa parece encimarse sobre mí. Me siento raro, es como que si le hubiese dado algo a alguien y ni siquiera le perteneciera.

— De haber sabido que eras tan bueno en la cama, te hubiese buscado antes. - Dice con sus ondas morenas apoyándose en mi pecho. Intento ignorar ese sentimiento molesto que me atormenta y solo sonrío.

Su teléfono comienza a sonar y ella maldice. — Debo irme, te veo mas tarde, lindo. - Y toma las sábanas para cubrirse. <<Déjà vu>>

Intento no pensar en lo que acabo de hacer. La culpa de hacerlo mientras pienso en otra persona no está bien. Creo que no es algo que yo haría, o eso espero. Así que de un salto tomo mi ropa, me visto y voy a la sala de estar. Comienzo a ver las fotos que tiene esta familia para distraerme. Y lo vuelvo a ver... El chico que vi con Rosie, está en casi todas las fotos de la casa. Creo que es muy querido en esta familia. Las malas vibras se apoderan de mí cuando lo veo.

<< —¡Max! ¡Ya suéltame!

— ¡Oye! ¡Déjala en paz! >>

— Max... - Digo sin más. Tomo la campera que me regaló Larry y parto para la parada del bus. Tengo que contarle a Frank, tal vez lo conozca.

Necesito aclarar mis dudas, por momentos me replanteo si buscar a Molly pero me convenzo en el camino de que no es lo mejor, quedamos con Frank que la protegeríamos. Y sé que debo hacerlo. Sin embargo, se que ella podría ayudarme a armar este rompecabezas.

Ya estoy cerca, debo admitir que caminar a estas horas es algo aterrador. Considerando que no hay muchas casas y hay poca luz, esto podría ser usado como set de grabación para una película de terror. Intento no pensar en los miedos y sigo caminando, estoy a unos pasos pero alguien interrumpe eso.

— ¿Evan? - Escucho de atrás. Es un chico, en su auto. Se ve de mi edad, y parece conocerme.

Doy unos pasos hacia el carro. — ¿Y tu quien eres?

— Jason Hills... - Nota mi desconcierto y sigue intentando. — ¿Compañero tuyo? ¿En la escuela? - Pregunta esperando una respuesta afirmativa de mi parte, lo cual no consigue. Sale del auto para estar más cerca, no tarda mucho en notar mi estado. — Demonios. ¿Cómo te has hecho eso? - Hace referencia a la cicatriz de mi brazo, y algunos moretones que todavía no desaparecen de mí.

El me conoce, tal vez me pueda ayudar. Dejo de lado todo lo pactado con Frank y prosigo: — No importa, necesito que me ayudes. - A lo que asiente sin más. — ¿Conoces a Molly Smith? - Su expresión se torna confusa al oír mi pregunta. — Necesito llegar a ella.

Se apoya en el capó del auto y suspira. — Lo haré, pero me dirás que ocurrió contigo.

Acepto y me subo. Necesito saber, lo poco que tengo no me sirve. Si el plan de Frank falla no llegaré a ningún lado, tengo que tener un plan B... ¿O no?

— Entonces... - Dice Jason para que comience a explicarme.

— No recuerdo nada. - Confieso. Espero que decir eso sea un buen resumen.

— ¿Qué? Debemos llevarte a la ambulancia. - A lo que meto el pie en el freno del auto. No puedo dejar que eso pasé.

— No. - Hago una pausa. — Escucha, alguien ha intentado matarme. No pueden saber que estoy vivo, no al menos hasta que recuerde lo que realmente pasó... Molly estaba esa noche, se que no ha hecho nada, pero puede ayudarme.

Hace un gesto de comprensión y de preocupación al mismo tiempo. — De eso no te preocupes. Es tu mejor amiga, seguro te echará una mano.

— Nadie puede saber de mi... - Digo por lo bajo permitiéndole conducir de nuevo.

— Pues eso no depende de mí. -Confiesa. No necesito preguntarle ya que el solo responde. — Si vas con ella lo sabrán.

¿Qué estoy haciendo? No puedo hacer esto. No debo ser egoísta... No. — Esto no está bien.

— Tal vez verla te ayudara. - Dice re formulando la frase.

— Si... Solo verla.