Todo Mi Amor Eres Tú [Freddchael] Completada.

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-¿Aloh...?- Contestó el rubio mientras que un ruidoso ambiente se escuchaba por detrás.

-Roger, necesito de tu ayuda- Dijo algo nervioso mientras miraba de reojo el joven y ahora borracho cantante patinar boca abajo por el suelo.

-Emm... Fredd, ahora no puedo, esta buena la pachanga viejo- Dijo entre pequeñas risitas, pues claramente se escuchaba que no estaba solo.

-¡Rog, no inventes! ¡Tengo a Michael totalmente borracho sobre el suelo gritando que es Mickey Mouse!-

El baterista rio -Al menos ya lo tienes- Freddie quedó en silencio, dandole a entender su molestia -Bien, bien... ya se, llevalo a su hotel tu solo, igual y sucede algo...- Dijo casi en susurro de manera picarona.

El contrario no lo pensó más y hablo como si de nada se tratase -¡Eres un jodido genio! Bien, supongo que será fácil, nos vemos mañana entonces, ¡disfruta tu pachanga!- Colgó, sin siquiera esperar la respuesta del otro.

Guardo el celular nuevamente en su bolsillo, y llevo su mirada de nuevo hacia el americano, aun se encontraba sobre el suelo.

-¡Wow, wow, wow! ¡Estoy volando, soy Peter Pan!- Grito mientras levantaba ambos brazos y ambas piernas.

Freddie infló ambas mejillas y se cruzó de brazos, si claro, muy fácil sería dijo él...

Se acercó y lo levanto tomandolo por debajo de cada brazo con mucha delicadeza, claro, pues aun así el contrario no era tan pesado.

-Ay, ay... ¿Qué... qué pasa?...- Dijo de manera un tanto inentendible, los ojos se le cerraban y ya era demasiado fácil de manipular, pues gracias a esto el mayor pudo sacarlo del lugar sin problemas.

Subió a la limusina y pidió de manera educada ir al lugar en donde se hospedaba el cantante, no estaba tan lejos, pues llegaron en menos de unos cuantos mintutos. Tomó el brazo del menor con cuidado y salió del transporte, siendo orientado por los trabajadores de aquel hotel al estar ya dentro.

-¿Necesitan algo más señores?- Preguntó amablemente la chica que los llevo al lugar.

Freddie negó con su cabeza, mientras mentenía a Jackson colgado sobre su hombro -Nop, muchas gracias linda-

-Bien, buena noche- Contesto ella antes de darse la vuelta e irse.

El bigotón suspiro aliviado ¿Cómo nadie vio nada sospechoso en el par? De plano una respuesta que jamas sabría. Poso su mano sobre la chapa de la puerta e intento abrirla. Era obvio que no se abriría, necesitaba la llave y por obvias razones el cantante de pop las traía guardadas.

Lo recostó sobre el suelo con cuidado y busco por sus bolsillos el objeto.

-Mgh... en donde las tienes...- Susurró mientras terminaba de buscar en los bolsillos de su saco negro, pero no, no se encontraban ahí.

Michael abrió ligeramente uno de sus ojos y soltó un pequeño quejido, paso su mano por su parte trasera, sacando la llave y arrojandola al suelo. -Bolsillo trasero ¿Cómo no se me ocurrió?

Tomó la llave y abrió, cargando nuevamente al borracho y cerrando la puerta con el pie al estar dentro. Recosto suavemente al menor sobre la esponjosa cama y se detuvo a mirar la habitación, era amplia y contaba con hermosos arreglos dorados, la base de aquella cama contaba con un gran espejo en la parte de arriba que reflejaba todo aquel que se recostara debajo, sin duda una hermosura de habitación.

Se acerco nuevamente a la orilla de la cama y se recosto al lado del chico de cabellos rizados, ahora quedó admirandolo a él, a pesar de que su tono de piel sea diferente, sin duda sus hermosas facciones seguían ahí, tan finas y masculinas a la vez. Ahora podía recordar una de las razones por las cuales tanto llegó a gustarle en el pasado.

Perdió su mirada en él, pero todo cambio cuando de repente este volvió a abrir sus ojos, por suerte, aun se encontraba bajo los afectos del alcohol, pobre.