Desde que se había enamorado irremediablemente y sabía que nunca sería correspondido, comenzó a frecuentar el Orión. Luego de pasar largas noches observando el trabajo que hacían entre el barman, el dueño del local y un mozo decidió que lo cambiaría. Conoció el club cuando uno de sus amigos –ya a las puertas de la muerte– le confesó cómo había llegado a ese estado. Cuando algún cliente se sentaba junto a la barra visiblemente deprimido, el barman comenzaba a emborracharlo y a hablarle de lo bien que se sentiría si compraba lo que el mozo vendía.
Lo trasladaban al privado del club, el mozo le vendía drogas que al parecer no bastaba con lo mala que era de por sí, sino que también la adulteraban, para mayor ganancia del dueño y desgracia del consumidor. Pero Joel no fue el único observador de la escena, un rubio alto y musculoso también observaba apoyado desde una columna. Cuando estuvo seguro de que Joel había visto lo mismo se acercó y le pidió permiso para sentarse en su mesa.
—Por supuesto, siéntate —estirando su mano para estrecharla contra el recién llegado— mi nombre es Joel Moore.
—Ángel Trelles, encantado —le devolvió el apretón de manos y acotó— creo que estamos observando lo mismo.
—¿Has notado lo que les hacen esos desgraciados a los clientes? —preguntó Joel.
—Al igual que tú. Hace tiempo que los vengo observando.
En ese momento ambos se hicieron muy amigos y continuaron reuniendo pruebas y observando los manejos de Jeremías Cabiezel, el dueño del club Orión. Al poco tiempo se les unió Gastón Navarro, pero éste estaba haciendo su trabajo: juntaba pruebas como ellos, pero por razones diferentes. Mientras que Joel quería comprar el club, Navarro quería meter a la cárcel a Cabiezel. El agente del FBI hacía tiempo que estaba tras la pista del dueño del club, tenía muy claro la clase de alimaña que era. También sabía que con todo el dinero que poseía siempre se salía con la suya pagando y sobornando.
Al poco tiempo se les unió Jorge Green, pero al él lo rescataron y fue uno de los pocos que escucharon y creyeron en lo que sus nuevos amigos le decían. Una noche los tres observaron como un joven pelirrojo, pecoso y de contextura física musculosa, había llegado hasta la barra del bar bastante alcoholizado. Al verlo perdido el barman siguió emborrachándolo y lo mandó con el mozo que lo aliviaría en su dolor. Antes de que se pudiese producir el contacto Gastón lo interceptó y lo llevó hasta la mesa con Joel y Ángel.
Entre los tres trataron de calmarlo y después de unas cuantas tazas de café lograron que Jorge comprendiera la situación. Se alió con ellos y en agradecimiento ayudó en lo que podía para evitar que otros cayeran tal y como lo hicieron sus amigos con él. Así se formó un grupo inseparable que se protegían los unos a los otros, y trataban de extender esa protección y ayudar a aquellos que se los permitían. Es tan fácil caer, tan fácil decirte "somos amigos", "yo te entiendo", "pienso como vos... los jóvenes en su inexperiencia y su depresión realmente creían que los estaban ayudando a mejorar o a sentir menos dolor. Lamentablemente tuvieron que presenciar varias desgracias sin poder hacer nada.
El club Orión era un excelente lugar para bailar, divertirse y pasarla bien si la persona se sabía manejar y si evitaba caer en las garras del barman. Era un lugar especial dónde cada uno podía ser uno mismo sin tener que representar un papel, o que la sociedad no los condenase.
En el club no solo pasaban cosas ilegales, escondidas, pero con muchos ojos atentos, también era el lugar propicio para quien supiera mirar, de la unión de muchas parejas.
Desde que el Orión abría sus puertas hasta que cerraba, la alegría y felicidad se apropiaba de la mayoría de sus asistentes, muchos habituales, otros solo de algunas noches, y los menos una vez a la semana, pero siempre estaba lleno, y quien iba una vez encontraba el clima para no dejar pasar demasiado tiempo sin hacerse ver por allí de nuevo.
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Piensa en mí... pensaré en ti © *COMPLETA*
RandomBrendan Hoffman es un importante abogado corporativo. Casado, pero harto de las peleas con su mujer, decidió separarse y mudarse al departamento al lado de su amigo Joel, o al menos ese era su plan. Joel Moore es arquitecto y lleva una vida tranquil...