Capítulo 48: Mala suerte 2.

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– Esa fue una mala idea. –Pensó Rin mientras comía a un lado de Naruto.– Todo esto fue una mala idea.

– Vamos no es tan malo, solo te odia. –Respondió la tortuga.

– Eso no ayuda mucho.

– Que es exactamente por lo que lo digo.

– Oye... –Le hablo Naruto a la mujer para sorpresa de esta última.– Tus padres, los has visto después de que te fuiste.

– No, no los he visto desde antes de irme. –Le dijo.– Aunque eso no significa que no pueda hablar con ellos. -Esta última respuesta extraño al rubio.

– ¿Te comunicabas con ellos? Pero solo fue hasta hace poco que las aldeas se volvieron aliadas. –Respondió Naruto, antes de pensarlo un poco mejor.– oh, ya veo...

– Mis padres fallecieron. –Dijo la castaña.– Ellos murieron cuando era muy pequeña, por lo que viví sola durante algunos años. –Rin dio un bocado a su comida y volvió a hablar.– De hecho fue por eso que me uní a la academia...

– Los huérfanos en la academia reciben apoyo hasta que se gradúan, lo sé. –Interrumpió Naruto.

– Y dime, ¿Cómo esta Kakashi? –Pregunto Rin.

– Llega tarde a todos lados y se la pasa leyendo un libro porno todo el tiempo. –Aunque Rin mantuvo un rostro normal, internamente estaba confundida por lo que dijeron.– Pero es un buen maestro, se preocupa por nosotros e intenta protegernos de cualquier peligro. –Rin en cierta manera se tranquilizaba, la verdad a ella se le dificultaba imaginarse a Kakashi como un maestro. Sin embargo, no se sentiría tan tranquila si alguien más fuera el maestro de Naruto.

A la mañana siguiente el grupo partió hacia el pueblo cercano del que le habían dado indicios. Llegaron a la media mañana y Jiraiya los dejo con el entrenamiento antes de irse a investigar. Rin decidió quedarse con los genin y ver si podía ayudarlos. La peliverde estaba realizando unos movimientos y posiciones básicas mientras tenia las pesas en sus tobillos y muñecas. La castaña no le seria de mucha ayuda en ese momento así que se enfocó en Naruto.

– Bien, voy a intentarlo. –Se dijo a sí mismo el rubio. Extendió ligeramente su brazo y puso su mano derecha hacia arriba.

– ¿Que está haciendo? –Se preguntó la mujer viéndolo. Naruto cerro sus ojos comenzando a acumular el chakra en su mano. La esfera de chakra se formó descontroladamente en su mano, Naruto abrió los ojos para verla e intento estabilizarla, pero no funciono, esta se deshizo al poco tiempo.– ¿Era eso un rasengan? –Se preguntó Rin un poco asombrada.

– Maldición, pude mantenerla más tiempo en los exámenes. –Exclamo Naruto.

– ¿Aprendiste el rasengan? –Pregunto Rin acercándose.

– ¿Lo conoces?

– Por supuesto, mi maestro lo creo. –Le respondió la castaña a lo que a Naruto le entro una realización.

– ¡¿Tu maestro?! –La mujer le asintió.– Pero, pero Ero-senin dijo que su alumnos lo creo. Eso significa que su maestro es alumno de Ero-senin.

– Si, así es. –Respondió la mujer.

– Mierda, debe de haber sido un pervertido como él. –Pensó Naruto.– Es una línea de maestros y alumnos pervertidos. -Se dijo Naruto mientras pensaba en Jiraiya, se imaginaba al maestro de Kakashi y recordaba a su maestro leyendo el libro.

– Entonces tu entrarías en esa línea. –Comento el Kyubi.

– Aunque, tu rasengan aún está incompleto. –Le dijo la mujer.– Le falta velocidad.

Un diferente equipo 7(Sasuke fem)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora