Eternamente Mío || LS

Capitulo 2

- Tu uniforme - la ropa cayó en su rostro - Muévete, quiero ver cómo te queda.

- ¿No puedes esperar hasta mañana? - preguntó, levantándose del colchón.

- No me cuestiones - apretó el puente de su nariz - Mi paciencia es nula, y estas agotando todos mis recursos para no tirarte por la ventana...

- Sí, claro - dijo, por lo bajo, y se puso de pie para ir al baño.

- No te dije que fueras al baño a cambiarte - Louis lo miró sin entender nada - Hazlo aquí, así te tengo vigilado.

- No voy a tirarme por la ventana del baño - dijo, con obviedad - No soy estúpido como para hacer algo como eso.

- De ti me espero cualquier cosa - dio unos pasos hacia él - Desvístete y no me hagas repetirlo.

- No lo voy a hacer contigo mirándome - hizo puños con la ropa, contra su pecho - No puedes estar hablando enserio.

- Lo hago - ladeó la cabeza, con una sonrisa sin humor - No es algo que no hayas hecho antes cuando estabas en la cárcel, ¿O era que sólo te bajabas los pantalones?

- ¿Por qué tienes que recordarme cada cosa que pasó? - Se bajó del colchón - Bien podías seguir con tu vida y morirte o marcarme y largarte.

- ¿Y dejar que el sufrimiento de no tenerte o dejar que la vejez me mate? - Negó, fingiendo, decepción - Claro que no - agarró la sudadera, y Louis gritó - Ya que no quieres por las buenas, lo haré por las malas.

- ¡No! - Golpeó las manos de Harry - ¡No me toques!

- Te lo advertí - sujetó las manos del omega - Haremos las cosas a mi manera - rompió la sudadera de un tirón.

Louis se tiró al piso en cuanto su torso quedó desnudo, detestaba su cuerpo. Pateó las piernas del alfa e hizo que cayera al piso de espaldas, sacándole un jadeó lastimero.

- Yo lo hago, pero no sigas... sólo aléjate - sollozó - No te acerques...

- No se quedará así - se sentó en el suelo - Esto que has hecho lo pagarás caro. Ya no hagas nada. Pediré que te traigan la cena.

Louis asintió sin mirarlo, levantó la cabeza cuando la puerta fue cerrada de forma ruidosa. Ya más calmado se puso la ropa y no le quedaba tan mal el uniforme, ya pensaría la forma en la cual pudiese usarla cuando comience a engordar por el embarazo. Se lo quitó y se puso el pantalón que tenía antes nada más, ya que la sudadera estaba hecha un desastre.

- Aquí tienes ropa que puedes usar - Harry entró con varias maletas y bolsas, bueno las traían sus trabajadores - Déjenlas ahí, él las ordenará todas en el closet restante.

- Sí, señor - dejaron las cosas cerca del colchón, y salieron de la habitación

- Saldré, no duermas tarde y si llego en la mañana espero que estés trabajando - Louis se alejó lo más que pudo de él - No salgas de la habitación, no hables con nadie y mucho menos andes de prostituta gratuita, ¿Quedó claro?

- No tenías que decirme eso - frunció los labios - Gracias por la ropa.

- Si, lo que sea - se dio la vuelta - No salgas de la habitación y no hables con nadie.

Louis se acercó a las maletas, las cuales eran muchas. Sonrió, había una maleta llena de ropa de embarazado, al menos ya tenía que ponerse para cuando su vientre creciera y llamara la atención de todos en ese lugar.

Abrió la puerta que estaba junto a la puerta del baño y entró la cabeza viendo todo con asombro y una mueca de asco. Sólo tenía trajes, estilo de un mafioso de los altos rangos. Al menos dejó un espacio donde poner su ropa; pasó al menos tres horas colocando la ropa en su lugar y midiéndosela.