Epilogo (FINAL)

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Harry se encontraba junto con Theo y su hijo Luke frente a la tumba de la persona que alguna vez amó con locura, a tal punto de tener un hijo con él. Se sentía bien consigo mismo después de todo, estaba feliz de que las cosas hayan terminado de esa forma. Ahora su hijo mayor iba a estar lejos de él por un largo tiempo y su pequeño omega de ojos marrones se quedaría en casa con él.

A su lado estaba la tumba de Eliot, la única persona que pudo acabar en tan poco tiempo con la vida de tantas personas solo por su egoísmo y su sed de que Louis se quedara con él. Había asesinado a la persona que lo ayudó a reconstruir todo su cuerpo e incluso su entrepierna, había sido en uno de los hospitales clandestinos que habían en Montenegro, uno de los doctores que se la pasaban día y noche buscando la forma de hacer cosas detrás de él, y con la llegada de Nicholas a la ciudad encontraron las cosas a su favor.

Cuando vio a su alma gemela cerrar los ojos de esa forma, lloró. Era la primera vez que lo hacía y se sentía miserable al no poder hacer nada para que abriera los ojos, lo único que pudo hacer fue abrazar al pequeño ser que lloraba en sus brazos en busca del calor de su madre. Louis había perdido mucha sangre y por esa razón su cuerpo no resistió lo suficiente. El nombre que le puso al omega que tenía en brazos había sido Luke, ni siquiera supo de donde salió el nombre, pero les recordaba mucho a su padre y a su abuelo con el color de su cabello.

Sonrió, al fin todo había acabado y se sentía bien consigo mismo al saber que esas dos personas ya no estaban con él. Luke tenía su nariz arrugada, era un omega precioso, sin importar que su vista no funcionara. Ya habían pasado diecisiete años que había pasado eso, y cada año iba con sus hijos y su ahora esposo, Theo ya no era el típico alfa que fue cuando era un niño después de salvarle la vida Louis de esa forma, se encontró a si mismo reflejado en su propio hijo.

Ahora era todo un alfa que cuidaba de su hermano menor como si fuese el centro de su mundo y se sentía bien al saber que había criado con ayuda de su esposo a ese ser tan maravilloso.

— ¿Nos vamos? No me gusta éste lugar — Louis se colocó a su lado — No quiero venir más a éste lugar; me da cosita.

17 años atrás

Cuando Louis despertó media hora después, todo volvió dentro de él. Sólo necesitaba una transfusión de sangre que fuera compatible con la de él. Después de que el omega fuese llevado al hospital, se quedó varios días en observación junto con el niño, por el cáncer que poseía en los ojos.

Pero, la única cura que podía tener Luke, era ser marcado por su alma gemela. Todavía recuerda cuando Louis regresó a la casa.

— Tengo que mostrarte algo, Louis— Harry se mostraba nervioso algo tenso — No quiero que te enojes por lo que vayas a ver.

— Me estás asustando — Harry lo guió hacia la habitación que siempre se mantenía cerrada — ¿Qué es todo esto?

— Es la habitación del bebé...

— Estos son todos los regalos que me han dado... — apretó el cuerpecito de su hijo — ¿Qué significa esto?

— Yo era quien te daba esos regalos, Louis — las cejas del omega se elevaron — Lamento mucho cualquier malentendido.

— ¿Lo lamentas? — Tensó los labios — ¿Sabes todo lo que tuve que pasar por tu culpa cada vez que llegaban esos malditos regalos?

— Lo sé, pero no quería que algo malo te pasara...

— Dormirás en la habitación de Theo — salió de la habitación — Y no quiero que la andes tocando porque Theo dormirá conmigo.

— Omega...

Eternamente Mío || LSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora