Capítulo 29

15 0 0
                                    


Pov's Omar

Hoy por fin volvería al lado de Scarleeth, me había tomado más de 1 mes arreglar todos mis asuntos y problemas pendiente, pero por había terminado todo, además, sé que ella era muy comprensiva y sé que lo entendería.

- ¿Listo?

- ¡Mas que nunca! -sonrió Franco.

Franco se había apuntado para ir conmigo a Oneira, desde ese día en que hable con él había cambiado y poco a poco había regresado a ser quien era, además, ahora se le notaba más decidido que nunca a recuperarla.

Comenzamos a caminar hacia el bosque, en una zona clara abrí un portal y ambos cruzamos, llegamos a la capital del reino estábamos a las afueras de la ciudad de Leizea, debíamos ir cerca del castillo para poder abrir otro portal hacia Oneira.

- ¿Tú crees que le alegre verme? -pregunto de repente Franco.

- Claro que sí, hombre -palmee su hombro y sonrió.

- ¿Dónde estamos? -pregunto sorprendido.

- Nos dirigimos al castillo de Leiza, de ahí nos transportaremos a Oneira.

- ¿Tardaremos mucho?

- No, eso espero.

Sin embargo, el día parecía ir en mi contra, porque apenas llegamos a las afueras de Oneira notamos que había como un increíble festejo, sin embargo, no reinaba la alegría, si no la tristeza, toda la gente estaba vestida de negro.

- ¿Así es normalmente Oneira? -pregunto de repente Franco.

- No, de hecho, no... -dije desconcertado- ¿Di-disculpe? -me acerque a una señora grande que pasaba por ahí- ¿Qu-qué es todo esto?

- Oh joven, una terrible desgracia...

- ¿Qu-qué sucedió? -interrumpió Franco a mi lado.

- Nuestra princesa acaba de fallecer... -soltó de la nada, dejándonos helados.

- ¿Qué? ¿Cómo...?

- ¿Cuándo? -interrumpí a Franco.

- Se le ha encontrado muerta ayer por la mañana, hoy será el entierro y enseguida se leerá el testamento que dejo preparado.

- Gracias por la información, lo lamento mucho -dije como si nada.

Dejé que aquella abatida señora siguiera su camino y comencé a caminar hacia el castillo con mayor rapidez que la de antes.

- Omar... Omar... -sabía que me hablaban, sin embargo, no podía prestar atención, me negaba a creer que esto estuviera pasando.

- Tiene que ser una broma.... Tiene que ser una mala broma.

- Detente -Franco me detuvo abruptamente- ¿Estas bien?

- No, no lo estoy, necesito verificar que esto sea una maldita broma...

- Tranquilízate, no quieras causar un accidente por ir corriendo, vamos los dos juntos.

- Tienes razón Franco, vamos.

Me calme un poco al ver que no era el único afectado y comenzamos a caminar apresuradamente hacia el castillo, había mucho movimiento y estaban restringiendo el acceso al castillo.

- ¡Alto! -nos detuvieron los guardias- No puede acceder, ordenes de la princesa Linette.

- Necesito verla, dígale que...

- Nadie puede verla.

- ¡Por favor! Dígale quien soy, ella aceptara verme.

- ¿Nombre? -dijo no muy convencido.

Wish and DreamsWhere stories live. Discover now