LUNA

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Multimedia: Zoé- Luna (Mtv Unplugged)

Gael.

30 de abril del 2018.

Cuando me planteé el irme de mi pueblo. El primer motivo que me motivó hacerlo fue la cobardía. No quería lidiar con todos los conocidos del pueblo, ni con nuestros familiares. Mucho menos quería tener que lidiar con Florencia y mi hermano. No iba poder vivir de esa manera.

Y a pesar de que lo he ido sanando hasta el día de hoy, no es como si me encontrara cagado de la felicidad por verlas. ¿Por qué entre toda esta gente las tuve que ver precisamente a ellas?

Esa es clara señal de que ya me cargó la chingada.

Pero la situación no fue tan dramática como yo pensaba que llegaría a ser. A ella no me dolió verla. Incluso me dio algo de felicidad el haber visto a mi sobrino por primera vez. Lo único que me dolió fue la actitud de mi madre, ella es la que no ha cambiado para nada. Por más que ella tratara de disimular, no se me pasó por alto esa decepción que vi reflejada en sus ojos. Para ella he de ser un puto caso perdido.

De reojo miro a Denise. El encuentro con ellas también le ha pasado factura, aun mas viendo mi actitud.

—Deni —la llamo con ternura. Ella de inmediato abre los ojos —. No estoy así por ella —me apresuro a aclararle con un deje de tristeza en mi tono de voz. A mi mente viene el rostro de madre. Hablarlo con alguien ha de ser lo mejor —. Es por mi madre. Me duele ver como es con ella... es como si fuera su hija —Denise toma una de mis manos —. Por Florencia ya no siento nada, hace mucho que dejé de sentirlo. Es la actitud de mi madre lo que más me molesta. Eso fue lo que me hizo un puto cabrón amargado.

—Pero ya no lo eres —le sonrío, o por lo menos hago el intento. Si Adara la escuchara decir aquello —. Por lo menos a mayor parte del tiempo.

—Quisiera no haberlas visto. Olvidar la mirada de mi madre al verme frente a ella en carne y hueso.

— ¿Quieres gritar? —niego tratando de ocultar una risa. Por lo visto quiere aplicar la misma terapia —. ¿O cantar?

— ¿Cantar? —la miro sin comprender —. ¿Y eso como por qué?

—Eso hicimos cuando estábamos paseando por Ajijic —empiezo a recordar ese paseo que hicimos. Como se veía que a pesar de todo lo que ella había vivido ahí, seguía amando ese lugar. Es su hogar al fin y al cabo —. Te recuerdo que somos cantantes callejeros, pero que no te oiga mi vecino de Vallarta. Suele ser un poco gruñón cuando escucha esa expresión —es ahí cuando una risa escapa de mis labios sin poder evitarlo.

—Y luego dices que Ricardo me pegó la locura —no responde. Solo se limita a aclararse la garganta. La miro atónito, en serio lo va a hacer.

Talk to me softly, there is something in your eyes —contra todo pronóstico, comienza a cantar la canción de Guns and roses —. Don't hang your head in sorrow and please don't cry. I know how you feel inside I've —su mirada se centra en mi por unos instantes —. I've been there before. Something is changin inside you and don't you know.

Don't you cry tonight. I still love you baby —sin pensarlo dos veces, comienzo a cantar a la par de ella —. Don't you cry tonight. Don't you cry tonight —la gente que se encuentra a nuestro alrededor solo se limitan a mirarnos —. There's a heaven above you baby. And don't you cry tonight.

— ¿A dónde quieres ir ahora? —le pregunto en lugar de seguir cantando.

—No lo sé, tu eres el que conoce el pueblo —Denise calla por unos instantes, en los cuales pienso a donde llevarla —. Aunque si hay un sitio al que me gustaría asistir —dice pasado un rato.

La única excepciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora