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Que no mamá... ¿Y yo que voy a saber qué comió? -saliendo de su habitación. -Bien. Adiós.

Namjoon no entendía cómo alguien como su hermano podía causar problemas a sus padres. Sí Yoongi era un buen chico y por una vez que volvía tarde se enfermaba.

-¿Problemas en casa? -sirviéndole un poco de café.

-Yoongi -sentenció sentándose frente a la taza -, parece que algo le cayó mal y se va a quedar en casa.

Yoongi mordió su pulgar. Se había quedado solo y el silencio llenaba la cocina. Se sentía mal de ver el desayuno que su madre le había preparado. Intentó comer la tortilla pero sus tripas le seguían doliendo, quiso comer fruta, pero seguía siendo algo pesado.

Se sirvió un poco de té y respiró profundo. Siguió con el jugo de naranja y yogurt con frutos secos. Se sentía sin ánimos de hacer nada, quería acostarse en la cama, pero recordó que tenía clase de pintura, así que sacó sus cosas y las puso sobre la mesa. Así poco tiempo después, desde su celular escuchaba Through The Dark de One direction y el ánimo le había cambiado, además, pintar lo animaba y lo distraía.

Pero el sonido del teléfono rompió con la tranquilidad. Yoongi bajó abruptamente la música y se asomó lentamente al balcón y vio ahí a un chico de pelo negro. Frunció el ceño y miró el reloj. Bajó para abrir.

-Hola ! -dijo animosamente con las manos en los bolsillos.

-Namjoon no está aquí...

El mayor con porte galante sonrió. Por la premisa con que había sido recibido y por la forma de vestir del chico: un abrigo blanco enorme y unos pantalones negros algo largos. Sumado a ello, una gorra negra que ocultaba su cabello desgarbado hacían que luciera un aspecto lánguido.

-¿No me invitas a pasar?

Yoongi miró dentro.

-Pasa -dejándolo entrar por fin. Viendo que caminaba rápido.

-Me he enterado que te enfermaste del estómago -mirando la tranquilidad que había ahí. Las paredes blancas del salón hacían que el sol, que entraba por la ventanas, inundara la habitación.

Yoongi tardó en procesar que alguien se preocupara por él.

-Ah. Eso, es solo que ayer, tal vez me excedí un poco con la comida. Últimamente no suelo comer mucho -confesó aligerando la importancia de tal hecho.

-Espero que no haya sido lo que comiste conmigo.

-No...

-Interrumpo algo? -mirando la mesa del comedor. Yoongi giró también sin notar que también había metido sus manos en sus bolsillos.

-Pues estaba pintando un poco. Tengo clase en un par de horas -girando con para volver a ver a su inesperado invitado.

-Ah, pintas... -acercándose sin aviso a la mesa, todavía con las manos en los bolsillos

-Acuarela.

-Vaya. Son buenos... -agarrando uno incompleto.

-Si, pero aún no encuentro el toque...

-Deja que tu corazón hable -sonrió Jin dedicándole una mirada rápida a el trabajo -descuida, ya encontrarás el punto.

Yoongi se quedó callado. ¿Qué hacia ahí? Estaba bien, ¿qué más necesitaba?

-Veo que ibas a comer...

-Esto...

-Pero esto está frío.

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