¡9!

7.7K 1.1K 41
                                    


—Inhala...exhala... —la voz de SeokJin lo calmó—. Eso es, cariño. Lo estás haciendo muy bien. En poco tiempo dejaras de sentir dolor.

JiMin sonrío sin ganas. El dolor de estómago era insoportable, sino fuera porque sabía que aún era demasiado pronto para sus cachorros, aseguraría que iba a dar a luz a mitad del pasillo de interrogatorios. Estúpido YoonGi.

"Tengamos un lindo cahorrito, al igual que tu" Le comentó unos días antes de su celo.

"Vamos, bebe. Te verías hermoso con un vientre rechoncho" Su Alfa le insistió cuando le dijo que debería tomar pastillas.

"Tu Alfa te cuidará mientras estés gordito, eres todo lo que necesito" Una de las ultimas cosas que le dijo YoonGi antes de que todo saliera mal y tuviera que huir de su casa con apenas un mes de embarazo para volver a su departamento de soltero.

—Creo que ya me siento mejor. Algo debió de caerme muy mal. Solo necesito descansar un poco y beber algo —comentó mientras se paraba con ayuda de SeokJin quien lo dirigía a una de las tantas salas de interrogatorio para que se sentara—. ¡Hey tú, chico de las copias!

El chico que pasaba por milagro a su lado volteó la vista. Traía unas cuantas hojas en sus manos.

—¿Podrías traerme agua mineral? Y algo picoso para comer, necesito algo picoso. ¡Anda, corre y hazlo! ¡Te amaré más que ayer si llegas en menos de cinco minutos! —el chico asintió y siguió su camino.

—Qué raro... ¿Por qué un chico del área de archivo va hacia las oficinas principales? No hay nada que hacer por allá... —cuestionó SeokJin tratando de acomodarlo en la incómoda silla de metal—. Debería ir a ver que sucede.

—SeokJin—el nombrado lo miró—. Ese chico me trae comida cuando se lo pido, no lo molestes por favor. Es el único que no me ignora cuando le pido un helado de mantequilla con trocitos de calabaza dulce y cono de chocolate. ¡No como otros!

SeokJin rodó los ojos.

—La única heladería que vende eso está al otro lado de la capital, en el distrito Dobong. ¡Nosotros estamos en el distrito Yongsan!

—¡Cuando estaba con YoonGi, me llevaba al distrito Gangseo por pasteles de arroz! ¡Y eso que vivíamos en Gangnam! —gritó molesto.

—Si, pero nosotros no somos tu Alfa JiMin, aquí nadie va a andar cumpliendo tus caprichos de embarazado. ¡Debiste de pensar en eso antes de quedar en cinta de un Alfa que bien sabias que no podrían tener una vida normal por mucho tiempo antes de que te dejara a tu suerte!

—Él no me dejo a mi suerte... —susurró—. No podía dejar que lo atraparan, no así.

—¿De algo sirvió? —SeokJin alzó una ceja—. De todas maneras, Nam lo encontró y lo metió preso. Estás solo en este mundo con cuatro cachorros creciendo dentro de ti. ¡No puedes ser un poco considerado teniendo en cuenta que no te metimos a la cárcel junto a tu Alfa por cómplice!

—¡Con que ahí está el problema! —se levantó lo más rápido que pudo—. Pues gracias por haberme separado de mi Alfa, ya ves que estoy de maravilla. ¡Yo no te pedí eso, estaba dispuesto a irme con YoonGi a la cárcel si eso significaba no sentir este dolor en mi pecho cada mañana en la que me despierto solo en la cama!

—¿Aún embarazado?

—Si, aún embarazado. Porque YoonGi no se merece estar lejos de sus hijos.

—JiMin... —SeokJin aclaró su garganta—. Perdón, no debí gritarte así. Comprendo lo que sientes. Yo sé lo que significa no estar junto a tu Alfa cuando más lo necesitas. No pretendía que llegáramos a esto.

—¡Pero llegamos! Ahora te agradecería que me dejaras solo. Necesito descansar y tu persona no ayuda mucho en este momento —con cuidado, se acercó a la puerta abriéndola.

—Vale, comprendo —SeokJin caminó saliendo de la habitación. Suspiró volviendo a la silla.

Era cierto, él sabía lo que hacía y donde se metía. No pudo evitarlo. Cuando miró esos ojos supo que sería el Alfa con el que pasaría el resto de su vida.

Rascó su nuca con desesperación. No podía seguir viviendo así, necesitaba encontrar una solución antes de que su lobo cayera en depresión. No podía poner en riesgo a sus cachorros. Luchó por tenerlos y no iba a dejar que nadie los lastimara, ni siquiera su propio lobo.

| Firepower | ~YM~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora