EL NIÑERO [X1-Lee Hangyul]

8

-¡Pero si yo no he dicho nada! -me defendí.

-Lo sé... pero la madre de Jennie me dijo que hablara con tus padres, pero como no están hablaré con tu tutor. Por eso llamé ayer por la tarde.

-¡Pero de que va a hablar con él, si no hice nada!

-Solo le explicaré la situación para que hable contigo y no causes problemas -me dijo sonriente.

En eso sonó el telefonillo, así que respondió con el típico "diga", solo asentía seriamente, para finalizar con el "dígale que pase".

A los cinco segundos entró la secretaria con Hangyul.

-Bueno yo me voy -dije poniéndome de pie sin siquiera mirar a Hangyul.

-No tan rápido señorita.

-¿Y ahora qué? -pregunté con fastidio volviéndome a sentar en la silla.

-Correr por los pasillos, ignorar indicaciones de autoridades y entrar a la oficina del director sin autorización -dijo todo eso apuntando en una tabla que sacó antes.

-¡Yo creí que nos llevábamos mejor! -dije riendo.

-Castigada el sábado a la nueve de la mañana... -me dijo antes de firmar la hoja blanca. -Aquí tienes.

-Pero... ¿el sábado a las nueve?

-Lo siento, son tres amonestaciones -me dijo serio. -No podrás acostarte tarde, ahora sal por favor -me pidió señalando la puerta.

-No es justo -susurré.

Me quedé detrás de la gran puerta de madera, miré hacia ambos lados para ver que no había nadie y cierto era, a estas horas todo el mundo estaba en clases. Pegué mi oído para escuchar detrás de la puerta. Pero era totalmente inútil. Me agaché para tratar de escuchar por el pequeño espacio que quedaba entre la puerta y el suelo. Se escuchaban más claras las voces, pero aun así era difícil. Trataba de concentrarme cuando vi unos zapatos negros, obviamente con dueño... o mas bien dueña. Me di la vuelta y me topé con la secretaria, me miraba molesta. Le sonreí torpemente mientras me levantaba.

-Yo... -tartamudee. -Yo... ¡perdí un pendiente! -le dije mientras me volvía a agachar y lo buscaba.

-¿Solo uno? -me preguntó incrédula.

Llevé mis manos a mis orejas y sentí que no traía pendientes -¡Hay no! Perdí ambos -mentí y me volví a poner de pie. -Creo que será mejor que me valla a clases -pero justo en ese momento abrió la puerta.

El director y Hangyul me miraban extrañados mientras que la secretaria sonrió victoriosamente.

-Yo, si... ya me iba -dije nerviosa mientras cogía mi mochila que estaba en el suelo y salí disparada de ahí. Me fui a mi casillero para coger los libros.

-Sabes, yo creo que necesitas una clase de control de ira... -me asustó por completo, ya que juraba que el pasillo estaba vacío.

-No te metas en lo que no te importa Hangyul -dije cerrando de un golpe mi casillero.

-Si me meto es porque eres de mi responsabilidad, así que tu terapia será esta -sonrió victorioso. -No te daré tu coche, no sales este fin de semana y dame tu tarjeta de crédito -me dijo mirándome fijamente.

-No te las daré Hangyul -le dije y comencé a andar a la clase.

-Dámelas -me tomó del brazo.

-¿Por qué? -alargué. -Además, tu me dijiste que no me ibas a quitar el coche.

-Y tu dijiste que no te pelearías más conmigo y casi me dejas sin descendencia -dijo con su mano extendida.

-Eres un idiota.

-Pues mira como este idiota te quita tu coche, dinero y permisos -me dijo mirándome con la misma furia que yo le miraba a él.

Abrí mi mochila, saqué cuatro tarjetas y se las tiré, pero increíblemente las cogió en el aire.

Me di media vuelta y me fui a la clase. Las clases pasaron rápido. Quería hablar con Lía, pero tenía que esperar hasta la hora del recreo.

-¿Qué paso? -me preguntó cuando llegué a la mesa de la cafetería.

-Que la estúpida de Jennie dice que la sigo molestando -le dije aun enfadada.

-Esa chica se está ganando que de verdad "la molestemos".

-Lo sé, pero eso no es lo peor -el enfado volvía a apoderarse de mi cuerpo. -Después viene Hangyul y me quita el choche, las tarjetas y me dijo que este fin de semana no saldré -Lía soltó una carcajada.

-Y qué ¿lo obedecerás? -me preguntó con un tomo de maldad.

-¡Pues no me queda otra! ¡Me dejó sin coche y sin dinero! Que más puedo hacer... -dije suspirando. -¿Sabes qué? -dije pensativa. -Saca tu móvil... -le dije mientras yo sacaba el mío.

-¿Para qué? -me preguntó extrañada.

-Tenemos que enviar muchos mensajes que enviar -le dije sonriendo. -Fiesta en casa de Park Yuri, envíalos a todos los contactos.

Ahora empieza lo bueno!!
Quería deciros que cuando llegue a los 800 vistos empezaré a publicar la otra adaptación. Esta vez son de dos miembros de X1 uno es Hangyul y el otro.... Lo diré mas tarde💓
Seguir Apoyándome para ver mas avances.