RECUERDOS

ACTO IMPERDONABLE

A veces trato de descifrar en que estaba pensando la contraparte de Kamisama al crearme con la finalidad de vengar su muerte, quizás pretendía que algo de éste quede como legado de que existió.
O simplemente fue un acto estúpido y desesperado.
Podría a penas haber durado un día con vida,
El idiota debió apuntar mejor al expulsarme al mundo.
Fui a parar en la espesura del bosque, pero lamentablemente muy cerca de los humanos.
Recuerdos confusos aún perduran en mi memoria, el resplandor blanco, el sonido de las hojas de los árboles, el viento suave que traía el aroma de las flores silvestres y el pasto, la sensación de confort que éstas cosas me provocaron...luego ese horrible sentimiento esa urgencia...un odio ajeno instalado en mi espíritu aprisionandome hasta que cumpla mi función o hasta que muera.
A penas con la conciencia suficiente como para defenderme y esconderme a los tumbos, empecé mi camino hacia mi objetivo.
Mi curiosidad me traería muchos problemas y duras lecciones, como que los animales salvajes que quieren devorarte son menos crueles que un humano.
Mi primer contacto con un humano fue con hombre que se adentro demasiado en el bosque a juntar leña, lo observaba a lo alto de un árbol en silencio.
Pero mi estúpida curiosidad hizo que baje de allí y sigilosamente me acerque para verlo con mas detalle, su olor era algo desagradable con el pasar de los años hizo que me de cuenta que ese olor era por que estaba ebrio, el ser se tambaleaba y murmuraba cosas, ese sonido ronco extraño eran palabras, muy distinto al canto de los pájaros o gruñidos de las bestias...cuando hizo algo extraño para mis oídos, había comenzado a cantar, me acerque aún mucho más fascinado, gravisimo error, este comenzó a silbar... al principio era agradable de oír como si fuera un ave, mientras recogía ramas, iba acortando distancia y derrepente ese sonido fue tan potente que me hizo gritar de dolor mientras tapé mis oídos con fuerza, ojalá me hubiera matado con su hacha.
Envidio mucho a Gokú a él lo encontró alguien bondadoso.

_Hola! Pero que tenemos aquí que interesante "animalito".

Imagino que en esa época mi tamaño sería el equivalente a alguien de unos 5 o 6 años,
Comparandome con el crecimiento de Dende, noto mucha diferencia, el pequeño ha tenido años de infancia y adolescencia, en cambio yo, crecí demasiado rápido, debe haber sido la voluntad de Daimaõ padre.
El monstruo me fue persuadiendo de que me salga de mi escondite, mientras me hablaba y cantaba, luego sacó algo del bolsillo de su camisa era rojo y olía dulce, ya había probado cosas dulces como frutas además de agua, pero ese aroma era delicioso tanto que le quitó importancia al hedor del hombre.
Cuando le quito el envoltorio creo que fue la primera vez que sonreí, eso era para mi.
Cuando me di cuenta este hombre me estaba cargando hacia su cabaña alejado de todo.
Cómo pude ser tan confiado?.
Cómo mi instinto no me advirtió como lo hizo con las bestias salvajes?