u n o

1.3K 198 31
                                    

Era temprano en la mañana en el auditorio principal del conservatorio, si mirabas con mucha atención podías notar cómo los integrantes de la Orquesta Juvenil de Seúl se separaban en grupos. Mayormente se encontraban distribuidos por sus instrumentos, se notaba ya que algunos adolescentes mantenían un círculo en el cual todos colocaban sus violines en posición de descanso o algunos otros con sus partituras, estuches y más en el suelo.

También estaban los extrovertidos que charlaban con diferentes personas, sea cual sea el instrumento que tocaran, entre ellos se encontraban Jeno y Jaemin, dos jóvenes músicos con un talento que se podía notar con solo ver con la delicadeza que sostenían sus instrumentos. Jaemin estaba sentado sobre una silla con su cello a un costado y su arco en mano, mientras Jeno se posiciona entre las piernas del pelirosa, con el estuche de su viola sobre su regazo y mientras, intentaba armar uno de los muchos atriles de la sala. El menor reía y acariciaba los mechones de su novio al ver como dejaba su lengua fuera, en señal de concentración.

Todos se encontraban allí por la misma razón, la inscripción que se realizaba todos los años en el conservatorio, junto a la presencia de los mejores profesores del lugar. Esta consistía de dos secciones, la primera donde se presentan todos los alumnos de años anteriores, ellos solo deberían interpretar una pieza a elección para demostrar el avance a los profesores, quiénes respecto a esta presentación deciden si pasan a un nivel avanzado o si se quedan en el mismo nivel del año anterior.

Si bien parece algo muy complicado o una situación la cual pone nerviosos a los alumnos, no es así, ya que todos mantienen un entrenamiento constante con sus instrumentos y no suelen haber problemas con las audiciones, por lo menos el 95% de los presentes avanzaban, mientras el otro 5% repite el año.

La segunda sección del día consiste en los nuevos chicos, quiénes audicionan por primera vez y están bajo constante presión. Como primer paso, todos tienen media hora para ensayar en una sala del edificio, allí son separados por sus instrumentos y luego continúan con las audiciones individuales, frente a los profesores y demás alumnos, tanto los nuevos como los viejos. Está es una de las etapas más aterrorizantes, pero no parece serlo para Huang Renjun, quién ahora en la sala de ensayo revisa sus partituras mientras llena de resina su arco, en completa paz y con una mirada de superioridad sobre el entorno.

El de nacionalidad china acomoda sus lentes y suspira mirando el reloj de la pared en señal de aburrimiento, había practicado su pieza unas mil veces antes de ir al lugar y aunque no lo demostraba, tenía algo de vergüenza de intentarlo allí, no por miedo a un error, Renjun no duda de sus habilidades con el violín, pero esto siempre le trajo problemas, ya que gracias a las pintas que el muchacho traía y la facilidad que tenía para tocar, la gente siempre pensaba cosas erroneas de el, como "debe creerse el mejor" "es un arrogante" o la peor "seguramente debe haber pagado para entrar". Eso le había pasado en diferentes orquestas, tanto en China como en Corea, pero ese año había decidido empezar de nuevo, con otra energía y más confianza.

Los pensamientos de Huang son interrumpidos al escuchar el sonido de las grandes puertas abrirse y siente una corriente recorrerle el cuerpo al ver al director de la orquesta, quién ya conocía, avisar que estaban por comenzar y que debían tomar sus cosas para ir al auditorio principal. Todos caminan en silencio hacia el lugar, cada uno con sus hojas e instrumento, al llegar a lugar pueden ver a todos los ya integrantes de la juvenil hablar en murmullos y señalar a todos y cada uno de los que entraban. Era casi una tradición para los adolescentes hacer apuestas de quiénes entrarían ese año y quiénes claramente no lo harían.

-No lo sé, el morocho que entró segundo parece estar confiado- Soltó YangYang como primer comentario -

-Yo apuesto por la de flequillito, tiene como 5 partituras- todos asistieron por el comentario de Seungmin -aunque también estoy de acuerdo con Yangie-

-El de lentes- Jeno giró su cabeza hacía Jaemin, ya que le asombró lo confiado que había sonado el contrario - vamos chicos, mirenlo, parece profesional y hasta su posición es perfecta, va a aplastarlos a todos. Además es muy lindo-

Las risas no tardaron en sonar, logrando que el bonito chico de lentes observara las butacas, donde todos se quedaron callados al ver la penetrante pero dulce mirada de Renjun. Otra vez la voz de director generó un gran eco en el lugar llamado la atención de los presentes.

-Como ya saben todos, empezaremos a llamarlos a cada uno en el orden que fueron anotados. Les pido que al escuchar su nombre, pasen a la silla- Dijo señalando una silla de plástico transparente, en el medio del escenario -con sus partituras y al terminar, van a pasar a las butacas en silencio, junto los demás. Al finalizar vamos a tomar un descanso de 10 minutos y vamos a dar los resultados de las audiciones, recuerden apagar sus celulares y les deseo mucha suerte- Con eso Donghae terminó y tomó asiento en una mesa junto a los demás profesores -

Los minutos empezaron a correr y la espera aumentaba los nervios de Renjun, éso, más las constantes mirada que sentía en su nuca.

↳orquesta ; norenmin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora