Diarios para Niall - Ziall - | LIBRO 1 |

ㅡ▸▷ 𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝐗𝐈 ◁◂ㅡ

Narra Zayn Malik

Me estaba ahogando, su comentario fue de verdad magnífico, aunque quizá él no sabía lo que significaba en realidad.

— La virginidad no es un dulce que yo pueda robarte y comérmelo. — dije riendo. — es estar los dos muy juntos, en un lugar solos, sin nada de ropa y acariciándonos.

— Es sexo. — dijo callándome. — se lo que es el sexo, Zayn, tu amiga estaba hablando de eso con uno de tus amigos, no soy un retrasado.

— Oh, lo siento, entonces sabes que no debería ser conmigo, ya que tú no eres gay. — dije marcando comillas con mis dedos.

— ¿Cómo sé que soy o no soy gay? Nunca he experimentado un noviazgo o algo como el sexo, la única vez que me encontré tan cercano de una persona fue contigo y fue por el beso de la mañana.

— Bueno tu dime, ¿Qué sentiste cuando te besé? — pregunté cruzándome de brazos.

No sé para que habíamos venido a pescar si solo íbamos a charlar.

— ¿No te dije que no se identificar aun las sensaciones? — preguntó mirando al agua.

— Aprenderás, yo te ayudaré, ya te lo había dicho, pero hay sensaciones que serán difíciles de describir, como la sensación de que estás enamorado de alguien, eso es más como un conjunto de sentimientos.

— Entonces enséñame, Zayn. — volvió a mirarme.

— Lo haré, lo juro, te enseñaré todo lo que pueda enseñarte. — le sonreí.

No estaba acostumbrado a que una persona de 16 años me hiciera berrinche, pero Niall me agradaba bastante y su situación era comprensible.

La tarde pasó entre risas, anécdotas de parte mía, chistes malos de la infancia de Niall y demás.

Conduje hasta casa, al llegar me aparqué justo frente a ella, pero ninguno bajó.

— Fue un día muy divertido. — dijo Niall aun entre risas.

— Fue divertido porque repetiste esa canción miles de veces. — apagué la radio y recargué mi frente sobre el volante, tomando aire, había pasado un día increíble.

— Eres un gran amigo, Zayn. — dijo tocando mi espalda con la palma de su mano, realmente deseaba y anhelaba por estar con Niall, ya que había sentido como mi cuerpo se estremecía a su tacto.

— Tu sabes que yo te veo más que un amigo. — susurré esperando que no lo escuchara.

— ¿Porque no....? —recargó ahora su cabeza sobre mi espalda. — ¿Esperamos a que la noche lo diga?

— ¿De qué hablas? — pregunté sin moverme, quería sentir el tacto de Niall un poco más.