Cuento 5:

1.3K 128 2
                                    

─Papá, siempre fuiste un ebrio violento que me hizo mucho daño cuando niño. Y heme aquí, después de tantos años, parado frente a tu tumba.
─Pero hijo... ¡Sácame de aquí! ¡Aún no estoy muerto!
─Lo sé – dijo él, mientras lanzaba tierra con una pala.

Cuentos para monstruos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora