La sal portada por el aire del mar se pegó en las pieles de las mujeres, despertando recuerdos en una de ellas que había enterrado hacía mucho tiempo. Recuerdos de una felicidad inmensa, de la calidez de un hogar y el recordatorio de la muerte, aunque no podías olvidarla cuando tu misma lo eras. Buscó la mano de la diosa blanca a su lado, y entrelazó sus dedos a los de ella. Habían separado sus caminos de los otros dos chicos del grupo en busca de una cura a una epidemia demoníaca que arrasaba con todo a su paso, con algo que ni siquiera una diosa de la vida y una diosa de la muerte podían darle una explicación más allá de magia antigua y oscura, una magia que ni siquiera los años de vida de la muerte podían darle una explicación clara. La diosa blanca le dio un pequeño apretón, su mirada aún así perdida en el horizonte, pensativa. Ástika rompió contacto con las nostálgicas olas de mar para perderse en la imagen de Ranya, miedo y mariposas recorriendo su estómago a la vez. Se permitió una leve sonrisa, porque si no empezaba a tomarse aquello con sorna y humor, podría sospechar algo y eso era una conversación para una noche sin luna con una hoguera de por medio, no en el epicentro del problema. Ranya fue la primera que separó sus manos y fue a tocar el agua con la punta del pie. Acto seguido se separó varios pasos con una cara de asco preciosa.
—Puagh, se me ha llenado la piel más de arena de lo que ya estaba, dioses, ¡qué asco!
Ástika no pudo evitar reír ante aquello. Al menos, con solo el vestido blanco que llevaba, tendría la ventaja de no llenarse de arena. Para poder acompañarla hasta ese punto se había quitado las botas y las había dejado por ahí cerca junto a la capa, ahora solo portando el mono de combate que siempre llevaba. Se agachó al borde del agua, mojandose las manos.
—Es por eso que prefiero las playas con rocas, al menos la arena no es tan escurridiza así que no da tanta cosa.
—¿Playas con rocas? No recuerdo haber visto ninguna.
—Están al norte. — Se levantó e irguió, sacándole varios centímetros de más a la diosa ante ella. Ranya era tranquilamente una cabeza más pequeña que ella, algo que le parecía adorable para lo borde, agresiva y llena de ira que estaba a veces. Como la vida misma. — Además, es gracioso que digas que no lo recuerdas cuando no te acuerdas de nada.
— Me lo vas a estar recordando hasta la saciedad, ¿verdad? Si lo llego a saber me voy con... — Antes de que pudiera acabar la frase, la muerte se colocó frente a ella y la miró a los ojos, obligándola a alzar la cabeza para que se cruzaran sus miradas con un toque de su índice bajo la barbilla. Parecía sonreír, pero en realidad no lo estaba. No la habría dejado a solas con aquél asesino ni aunque su propio destino dependiera de ello. No era ninguna heroína, ni quería hacerselo, pero no podía dejar a una persona tan importante en manos de semejante engendro. Parte del asco y la rabia se le pudo ver reflejado en los ojos, Ranya viendo más allá de ellos; viendo la genuina preocupación. Las palabras de Ástika vinieron en un susurro algo grave, demandantes a la vez que suplicando.
— Quédate conmigo.
¿Qué haces cuando una diosa más preciosa que la propia luna te pide que te quedes a su lado con esa mirada, con ese tono? Te quedas y compartes todo el tiempo que tengas con ella, y eso hizo Ranya. Necesitaba chillar, su cuerpo parecía pedirle o lanzarse y darle un beso o chillarle al mar que lo único bueno que parecía traer era esa faceta de la diosa. En su lugar respiró profundamente a la par que mantenía el cruce de miradas y una máscara de indiferencia y seriedad encima. Ástika la terminó soltando, cambiando completamente de personalidad; sonrió con suavidad, separándose varios pasos de ella para darle tiempo a respirar. Ahora que sabía que estaría junto a ella para poder protegerla, para vigilarla, estaba más tranquila. Caminó hasta sus cosas y se giró hacia la diosa, quien no había separado por un momento la mirada de ella. Extendió su mano, ampliando la sonrisa hasta sus ojos. Esta vez era una pregunta más gentil, más caballeresca.
— ¿Nos vamos, mi vida?
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Fictober 2019
Fanfictionbrought to you by yours truly será un mix de OCs, canon pairs, etc enjoy!