El Motivo de mi Perseverancia

Capítulo IX

Narrador Normal:

Silencio es lo único que había, en el campo de batalla estaban reunidos los 64 entrenadores que buscaban el título de Campeón de Alola, cada uno de ellos se miraban expectantes entre ellos, buscando algún signo de debilidad o de nervios en sus contrincantes; a pesar de ser sólo unos segundos, la gente empezaba a impacientarse porque querían empezar a ver acción.

Unos segundos después, al unísono todos gritaron ¡Yo te elijo! y fueron liberados una diversidad de pokemon, que tenían la misma mirada desafiante de muchos de sus entrenadores; había un Jolteon, Aggron, Electrivire, un Oricorio, además del Scizor de Guzma, el Umbreon de Gladio, el Decidueye de Hau, el inseparable Pikachu de Ash, entre otros pokemon.
Todos se miraban entre ellos, la tensión entre ellos se sentía entre ellos, y ninguno se atrevía a dar el primer paso, o eso pensaban hasta que oyeron a uno de los árbitros.

¡Dartrix ya no puede continuar, el participante Take está fuera!- anunció Kaudan, rompiendo la tensión del momento entre los participantes, para ver como Pikachu tenía chispas eléctricas en sus mejillas después de impactar su Impactrueno en el tipo Hierba/Volador.

Bien hecho Pikachu, vamos a por más- dijo Ash a su pokemon, para posteriormente buscar a otro rival.

Ante esa acción del azabache, la Battle Royal finalmente empezó, y todos empezaron a buscar a alguien con quien enfrentarse, resultando duelos  como el Scizor de Guzma contra un Scolipede de otro entrenador; el Umbreon de Gladio contra un Machoke, Vikavolt de Chris contra un Ninjask, y en duelo sumamente atractivo y de alto voltaje fue el de un Seviper contra un Zangoose, que más allá de obedecer las órdenes de sus entrenadores, siguieron a sus instintos, que finalmente terminó en un empate.

La competencia poco a poco se fue reduciendo, pasando en unos 20 minutos, de 64 participantes que eran en un inicio, a casi la mitad de los mismos, por lo que ahora la estrategia era lo que iba a reinar en los combates que iban a darse, cuidando al máximo la cantidad de daño recibido para evitar ser una presa fácil para los demás.

El Turtonator de Kiawe acababa de eliminar un Magmortar, luego de acertar una potente Onda Certera; e inmediatamente un entrenador robusto, con vestimentas de un amante del rock, se colocó frente a él, con su Electrivire, ambos con una actitud confiada, pensando que todo esto de la liga sería un paseo de niños por el parque.

Y sin decir una palabra entre ellos, inmediatamente Turtonator y Electivire midieron fuerza entre ellos, estando parejos, sin que ninguno de los dos quisiera ceder un poco a su rival, luego de unos segundos de estéril forcejeo, estaban por separarse, cuando Kiawe le ordenó a su Turtonator usar un Lanzallamas, ante el cual Electrivire no pudo hacer nada más que recibirlo de lleno, y debido a la potencia del ataque, fue mandado a volar y chocó contra una de las vallas que separaban al público del campo de batalla.

P-pe-pero ¿Cómo?- se dijo sorprendido el entrenador del Electivire al ver a su pokemon fuera de combate.

Eso es fácil de responder- dijo Kiawe, ganando la atención del entrenador.
No menospreciaste, y a Turtonator no le gusta ser menospreciado; lo único que lograste fue provocarlo- dijo Kiawe, mientras se daba la vuelta y buscaba a otro rival, mientras el entrenador iba a por su Electivire.

Por otra parte, Gladio sostenía un reñido combate con Layla, una entrenadora con un Jolteon, que empezaba a fastidiar a Gladio, ya que la velocidad y la capacidad de esquivar de Jolteon estaban frustrando a su Umbreon, que poco a poco empezaba a cansarse, ya que Jolteon, además de esquivar, le lograba conectar algunos ataques.

Umbreon, espera un momento- le ordenó Gladio, a su ya cansado pokemon, que ya estaba respirando por la boca, e hizo lo que le pidió.

La chica, al ver que su rival se quedó quieto, le ordenó a su Jolteon ir tras su rival con un Ataque Rápido, más nunca se espero que Gladio, justo antes que el ataque le impactara a su Umbreon, le ordenó usar un Pulso Oscuro, el cual por lo cerca que estaba, ya no pudo esquivarlo, y aunque no logró debilitarlo completamente, si lo dejo bastante aturdido, cosa que aprovecharía Gladio para que su Umbreon atacara con una serie de Bolas Sombra y Pulso Oscuro, para finalmente derrotar al Jolteon de Layla.