Crater

¿Quieres nadar en...

Julio me esperaba en el living de la casa, iría a  cenar con el, amo el echo de hacerlo, pero aun quiero jugar con el, quiero hacerlo sufrir diciéndole que no lo amo.

-Wao- queda Julii estupefacto al verme, el vestido resalta bien mi figura era corto y asentaba perfectamente en mi cuerpo; llegue hacia donde Julio estaba parado, me extendió su brazo y gustosa lo tome -Te vez hermosa- susurro en mi oído y besándome la mejilla.

-Gracias, ju- asi le solía decir cuando tenia 14, ju, el sonrió y caminamos a hacia el garaje de la casa, Julio me ayudo a subirme en el auto, un Roll Royce negro, conozco ese auto, mas bien tenía uno en nueva york, pero creo que ya no tengo la autonomía de ese auto, pero en fin, julio y yo llegamos a un restaurante Taiwanes con comidas típicas de Taiwan.

Bajamos del auto, y entramos al restaurante, Julio había reservado una mesa casi alejada de todos, junto a un ventanal gigantesco del cual se podía ver toda la ciudad.

-Wao Taiwan es un pais muy hermoso- dije mirando el ventanal.

-Tu eres hermosa- al decir eso me sonroje, el sonrió de oreja a oreja. me sentía tan bien al lado de julio, que aun no se por que no vuelvo le confieso que aun lo amo.

-¿y por qué querías traerme a cenar?- dije timando un sorbo de un vino seco que había traído un mesero.

-Pues quiero hablar contigo, sobre nosotros- dijo mirándome con un gran brillo en sus ojos.

-Demonios Julio, ya te dije que no siento nada por ti...- eso me dolió.

-No te creo, nuestro amor fue muy fuerte como para que me olvides hací por hací- iba a hablar pero el me interrumpió- dilo Samantha, di que aun me amas, yo lo se, aquel beso del otro día me lo dijo ¡todo!.

-Solo fue un beso, no es para tanto- el río -tu te fuiste, me dejaste, y no eras el único hombre en el maldito mundo, Julio lo siento...

-Si como no, entonces, ¿por qué mirabas mis fotografías en la pared?¿por qué me besaste?¿por qué hiciste el amor con migo después de tanto?¿eh?

-¡Ok ya si, Julio aun te amo, lo siento, es solo que sufrí demasiado cuando te fuiste...

-Lo sabia- dijo muy animado y se arrodilló frente a ti y tomo tu mano- Samntha, se que me separe de ti para una vida mejor, y cuando ya estaba lejos y no podía volver, me di cuenta de que lo eras todo para mi y aun lo sigues siendo, no puedo evitar mirarte y no poder besarte, Samantha por favor, vuelve con migo...

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Narra Ámbar:

Estaba en la cocina comiendo una manzana muy normal y relajada, pero siento deseo de algo no se que, pero tengo deseo de algo, de repente en la cocina entra Nolan con el pelo goteando y un traje de baño, a lo mejor estaba nadando en la piscina.

-¡Hola!- me saluda y se acerca a mi, y por primera vez lo veo mejor, musculoso, con ojos totalmente azules, unos labios para querer comérselo.

-Hola..- Respondo de una manera muy seductora, agarro un mechón de mi cabello y lo comienzo a enredar en mi dedo -¿estabas nadando?

-Si ¿por qué?- preguntó

-No por nada- y los dos quedamos callados metidos en nuestro pensamiento, y sentí ansias, ansias de besarlo y hacer que me folle, ya estoy aburriendo de tener tanto sexo con Randy.

-¿Quieres nadar en otra parte?- dije parándome y dirigiendome hacia el para besarlo y para que entendiera lo que yo quería hacer.

-¿por ejemplo?- pregunto con la respiración entre cortada por el beso sin previó aviso.

-Dentro de mí...

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Narra Randy:

Estaba con marina en mi habitación, planteábamos llamar a una pareja de mafioso, lo mejores diría yo para que nos ayudaran a acabar con los Goldied.

-¿Ellos están aquí?¿en Taiwan?- pregunta Marina.

-Si, supuestamente, tengo sus números yo los llamaré mañana.

-Esta bien, oye Randy- llama mi atención, me mira unos segundos y se abalanza sobre mi para besarme en la boca y luego bajar a mi cuello lo cual me existo...

-Quiero tener sexo- me beso- ahora- volvió y me besó- desnudame- y comenzó a besar mi cuello salvaje mente