Honest Feelings.

Capítulo Dieciocho.

「Abismo insoportable」

Apartamento de Dazai Osamu.
Yokohama, Japón.
6 de julio del año 20XX.
Horario: 12:07 am.

━ Terminemos.

Creyó por un minuto que era todo una broma, que solo lo hacía para ver su reacción y luego reírse en su rostro. De verdad que su mente se llenó de pensamientos fantasiosos de que ésa rutina a la cual se había acostumbrado, seguiría intacta. Sus hermanos y él viviendo con Dazai no fue tan malo como desde un principio pensaba, en cierta parte Osamu tenía un aura amigable y apacible. Era agradable estar con él.

Pero fue un tonto al creer todo eso.

Porque meramente era su mente que estaba jugando con él y contradiciendo los hechos.

Trató de acercarse al omega pero en cuánto se acercó, solo recibió que éste se levantara de la mesa y fuera a la cocina para lavarse el rostro obviamente inundado de lágrimas. Nakahara lo miró aún desde su lugar, extrañado por su comportamiento. ¿Qué le habrá dicho su padre cómo para estar así? Cuando volvió creyó nuevamente que lo iba a mirar, sin embargo solo pasó a su lado. Lo ignoró. Harto de escuchar a sus pensamientos y su mente que le ilusionaba tanto con algo que no iba a pasar, decidió girarse hasta atrás donde Dazai se dirigía hacia su habitación. Si el menor era sincero, quería dormir, quería dejar un minuto el mundo real.

━ ¿Eso es todo?━ cuestionó el pelirrojo, el chico pausó su caminata hasta su cuarto solo para escuchar lo que tenía que decir. Ante su pregunta tragó grueso.

━ Sí. ¿Qué esperabas? ¿Un testamento con razones para dejar éste circo?━ una ceja arqueó dirigiéndose hacia a él. Chuuya sintió un nudo en su tórax, una opresión grave sentía en esa parte. ━ Hay que terminar, eso es todo.

Dijimos que íbamos a conocernos y ayudarnos a mejorar como personas.

━ ¿Por qué?━ preguntó el mayor aún confundido, su entrecejo se frunció, intentó confundirlo con enojo cuando en realidad; sentía una picazón en sus ojos. Lágrimas amenazaron en correr por todo su rostro. ━ ¿Por qué luego de tres semanas cambias de opinión? ¿Qué hay de Gogol?

━ ¿Qué hay de qué con él?━ una risotada dolorosa soltó. ━ Obviamente que será mi nuevo alfa y también mi esposo.

Pero en cambio nos tiramos dagas entre ambos. Dagas que hieren éste corazón húmedo lleno de sentimientos.

No quería escuchar más, sinceramente fue mejor no preguntar. Aquello no le hubiera hecho sentir peor, lo más doloroso no era ese agudo dolor en su tórax, la picazón que creció gradualmente en sus pupilas o lo desesperado que se sentía en gritar para darle un respiro a su corazón. No. No fueron dolorosas sus palabras, tampoco su repentino comportamiento frío o los buenos momentos que pasó con él, para que luego terminara en una repentina despedida. Lo doloroso fue la marca que los unía, como su alfa interior comenzó a aullar de pesadumbre ante el rechazo, estaba agonizando y sangrando frente a Dazai, el omega que creyó salvar de la inanición y de un matrimonio forzado.

Dazai sabía que lo estaba dañando y que después de ésto, él iba a agonizar más de desconsuelo por la marca que los identificaba como una pareja. Aunque esas palabras eran mil espadas y ninguna lágrima de pésame o emoción, para él era estar en un biombo en soledad y tener que escuchar los llantos fúnebres de las almas en el infierno.

El pelirrojo sin más que decir, pasó a un lado de el hijo de Tsushima para dirigirse al cuarto que compartieron. Rápidamente tomó sus cosas, Fumiya quién estaba en el cuarto escuchando todo y sosteniendo a la pequeña Takako dormida; estaba llorando por el pecado que había cometido, la consecuencia que llevaría sería grave. Cuando terminó de empacar sus cosas, fue hasta el cuarto de Takako e hizo lo mismo, las ordenó en la maleta, el mismo procedimiento hizo con la ropa de su hermano menor. Dazai estaba respirando con dificultad sin poder procesar bien las cosas. Lo que había dicho y hecho, lo que le obligaron a hacer para que Chuuya no fuera la víctima de su padre. ¿Cómo podría mirarlo sin sentir disgusto por las cosas qué su padre le hizo a su padre? ¿Cómo podría disculparse por él sin ser odiado por Nakahara? Y lo más importante, ¿cómo iba a salvarlo cuando su padre ya le tenía un punto rojo? Tragó grueso. No podía dejar que Chuuya muriera por su mero capricho, ya intentaron matarlo una vez, él se arriesgó por él.