The Adventures Of Jihoon & Yoojung ||JimSu||

2-Duo

- ¡Primer día de clases! -Yoojung no había parado de gritar lo mismo desde que había despertado, estaba simplemente emocionada, era la primera vez que tanto ella como su hermano irían a la dichosa escuela, y quien no se veía tan emocionado era su hermano-. Jihoon ¡vamos a ir a la escuela! -su hermana le volvió a gritar.

- ¿Podrías no gritar cerca de mi oído? -simplemente Jihoon no creía que su hermana estaría tan emocionada solo por enterarse de que entrarían a clases, eso a Jihoon no le gustaba para nada.

Yoongi miraba a sus dos pequeños, sonrío, no se imaginaba que sus reacciones fueran diferentes, pero debía admitir que inclusive él era así, cuando se entero que tendría que alejarse de su casa por unas horas, había enloquecido por completo, sus padres tardaron casi dos horas en sacarlo de la casa, y es que no quería separarse de su kumamon y la cama, tan bellos recuerdos.

- ¿Están listos pequeños? -pregunto Jimin mientras se colocaba detrás de Yoongi abrazándolo por la cintura y dándole un beso en la mejilla.

- ¡Suéltalo! -Jihoon se escuchaba molesto, a lo que Yoongi solo soltó un suspiro, camino hacía él y se coloco de cuclillas para poder estar a la altura del pequeño.

- Jihoonie, ya hemos hablado de esto antes -inclusive desde que era un bebe-, Jiminie y yo somos pareja, no debe de molestarte eso.

- ¿Por qué no? -para Jihoon estaba bien el molestarse, no le gustaba que ese alfa tocará a Yoongi, nunca le ha gustado, pero lo aceptaba a veces porque Jimin lo recompensaba con dulces, (de lo cual Yoongi no estaba enterado aún).

- Porque los celos son malos mi niño, y debes aprender a controlarte, ¿o quieres ser igual de celoso que Jiminie? -de inmediato Jihoon negó rotundamente.

No quería ser igual de celoso, Yoongi una vez le tuvo que relatar la historia de como Jimin lo había mordido bruscamente solo por estar celoso, y definitivamente no quería hacer eso, y menos si encontraba su pareja, por supuesto que no quería comportarse de aquella manera.

- Bien, entonces, prométeme que no volverá a suceder esto -Jihoon de inmediato asintió, se sentía algo avergonzado por su comportamiento-, muy bien, pequeño, ahora dale un abrazo de despedida a Jiminie, seré yo quien los lleve a su primer día de clases.

De inmediato Jihoon se acerco hacía Jimin, el alfa se coloco en cuclillas para recibir en sus brazos a Jihoon, solo esperaba que las palabras de Yoongi hayan sido lo suficientemente efectivas está vez, o sino, Jihoon sería capaz de golpearlo solo por darle un beso en los labios a Yoongi.

- ¡YooYoo! -Yoojung se acerco hacía Yoongi para poder abrazarlo, ella se sentía muy emocionad, podía explotar de la emoción, ya quería ir a clases-, ¿ya vamos a irnos?

- Ya, pequeña, despídete de Jiminie -de inmediato la niña corrió hacía el alfa, y junto a Jihoon lo abrazaron de nuevo.

- Cuídense mucho, cualquier cosa que necesiten, no duden en pedírsela a YoonYoon -menciono Jimin de inmediato, dándole a cada pequeño un beso en la cabeza-, los veré en la tarde.

- Vayan al auto, iré con ustedes en unos momentos -de inmediato ambos niños se miraron y comenzaron a correr.

Siempre las competencias estaban muy presentes entre ambos.

Jimin había conseguido un trabajo en unas oficinas, siendo él quien se encargaba de revisar equipo de computo y programas, además de otros asuntos en juntas importantes, Yoongi se dedicaba a trabajar desde casa, principalmente por el hecho de cuidar de ambos cachorros y además de que podía trabajar creando sitios web y administrándolos, pagaban bien por solo hacer algo así.

- ¿Sabes, YoonYoon? -el omega sintió los brazos de Jimin rodearlo por la cintura y acercándolo hacía él-. Es muy lindo tener una familia contigo, ¿quieres otro cachorro? Me encantaría otro -sintió los labios del alfa sobre su cuello, deslizándose suavemente, causándole un suave cosquilleo.

- No, Jiminie.

- Por favor, omega -sintió las manos de Jimin acariciar sobre la tela su abdomen-, te veías muy lindo cuando estabas embarazado.

- Dije que no, alfa -Yoongi estaba sonriendo, mientras se dejaba querer con aquellos pequeños mimos que le daba el alfa-, mejor me voy antes de que pienses que es buena idea reforzar nuestro lazo.

- No es tan mala idea ahora que lo pienso -deposito un beso en el cuello del omega-, ¿no quieres? Es temprano.

- No para la escuela, tal vez después, cuídate, alfa.

- También tú, omega.