Miró constantemente su teléfono celular, esperando un mensaje, una señal...
Algo que demostrara que aún eran amigos.
Lamentablemente, nada llegó.
Un quejido lastimero escapó de sus labios, seguido de lágrimas e insultos así mismo.
¿Por qué siempre lo arruinaba todo?
De alguna manera se culpaba, de todo, cada cosa y cada detalle, sentía que todo era su culpa, tan simple solo como eso.
¿Por qué su corazón se oprimía tan fuerte con su ausencia?
Se sentía como antes, en la completa oscuridad, cayendo en lo hondo de todo, sin tocar una superficie.
¿Siquiera había una superficie? Probablemente no, a lo mejor esa tristeza era infinita, nunca acabaría de tocar fondo con ella.
Sentía al latino como su luz, aquella mano que le ayudaba a no seguir cayendo en la oscuridad, y ahora que se había ido de su vida ¿qué le quedaba?
Nada, simplemente eso, nada.
Él era nada, un cero, una hoja del éxito mal formada. Claro, tenía éxito, ¿eso quién no lo sabía? Pero no le bastaba.
Lo sabía, era un egoísta, un maldito y codicioso egoísta, él quería volver a tener al latino a su lado, que simplemente no se separe de él.
Se sentía como la peor persona del mundo, sintió su máscara romperse sin lograr hacer algo.
¿Podría recoger los pedazos?
...
— Venezuela... —Dio tres toques a la puerta, sintiéndose débil con cada acción, cada movimiento que daba sentía la oscuridad consumirlo más y más.
Aunque simplemente, no hubo respuesta.
— Sé que estás ahí... —Nuevamente aquel silencio, ya el estadounidense sentía sus ojos llorosos, como cada parte de su ser se sentía más y más débil.
Nuevamente fallaba, nuevamente caía, nuevamente entraba en aquel trance.
— Venezuela... —murmuró, tratando de poder decir algo sin que su voz se notara quebradiza—, sé que no querías que supiera eso, no te tengo miedo, Venezuela, yo puedo soportar cualquier golpe, cualquier cosa... —Mintió, él mismo sabía que no era así, pero no lo hizo para mentirle al latino, sino para mentirse así mismo.—. Tú... ¡Tú eres mi rosa! —exclamó sin pensar muy bien en lo que decía, solo quería que las palabras fluyeran.— ¡No importa cuantas espinas tengas! ¡No me interesa si salgo lastimado! Maldita sea... ¡Venezuela, yo..! —No pudo continuar, volvió a la realidad, sintiendo las lagrimas hacer un camino por sus mejillas.
Venezuela escuchaba todo, de la misma manera, lloraba en el suelo, al otro lado de la puerta, sintiéndose como una mala persona, culpándose.
De igual manera, ambos se sentían fatales.
Decidido, Venezuela se levantó del suelo, cerró sus ojos, limpiando sus lágrimas para aparentar ser fuerte a pesar de todo, luego abrió la puerta.
Para cuando abrió los ojos, no había nadie...
USA se había ido.
Y era su culpa.
Otra vez.
Ambos se sentían culpables por nada, por algo de lo que no tenían control pero aparentaban tenerlo.
Simplemente eran los peones de la culpa y tristeza que los dominaban a ambos.
Y que al final de cuentas, los terminaría por consumir.
|| Les traigo este capítulo kk, pero es que tengo tarea que hacer ;;
Capítulo dedicado a: __ChocoMuffin ❤
Pd: gracias por sus comentarios, me encantan ❤❤
Capítulo re-subido para ver suñi Wattpad pone los guiones como son.
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Depressive. || UsaVene
Fanfiction- I'm Fine! «Sálvame» - I Feeling Fantastic! «Me estoy desmoronando» - I Hate You... «Te necesito» [ Portada por: @__ChocoMuffin ]