NIÑERO DE UN MAFIOSO (YAOI)

CAPITULO 23

~ JUN-CHAN ~

Cuando me desperte no sabia donde estaba, mire confundido hacia todos lados y reaccione. "Es la habitación de Satoru-san", lo busque a mi alrededor sin exito asi que decidi salir lo mas rapido posible.

Intente ponerne de pie pero mis piernas y cadera dieron una punzada que me obligo a caer de rodillas.

-Duele, duele, es peor que la vez anterior.

La primera cez que estuvimos juntos, el coraje y orgullo que senti me sirvieron de mucho para olvidar el dolor en mi cadera y piernas, pero esta vez no habia alisiente.

Me incorpore y tome mi ropa del suelo cambiandome lo mas rapido que mi cuerpo me lo permitia. Sali del cuarto y escuche a Satoru-san hablar con alguien. Trate de actuar lo mas normal posible, como si nada hubiera pasado, asi que me acerque a él y le hable.

-Buenos dias Satoru-san, ¿quiere desayunar?- actua normal, actua normal.

-Si, levanta a Riki, por favor.

-Si, le llamare en cuanto este listo.

Me dirigi hacia la cocina, al parecer algo serio pasaba ya que su cara no mostraba ninguna pizca de alegria como el día de ayer.

-El día de ayer...

Senti mi cara arder al recordar la noche que pasamos juntos, me habia dejado llevar al saber que él habia terminado con su novia, pero ahora me arrepentia fervientemente de eso.

Saque algunas cosas del refrigerador y comence a cocinar, volque toda mi concentración en eso que no me di cuenta cuando alguien entraba, sino hasta que senti unos brazos rodearme desde atras.

-Buenos dias, perdon por no saludarte hace rato. ¿como amaneciste?- me dio un beso en la mejilla y se recargo en mi hombro.

-Bi... bien- senti su calor en mi espalda, ya que solo llevaba puesto su pantalon del pijama.

-Mentiroso, si caminas como cervatillo recien nacido, jajaja.

-¡Gracias a quien sera!, y muevase, dejeme terminar el desayuno.

-Ya, ya, no te enojes.

-No me... - me calle enseguida en cuanto senti como algo escurria entre mis piernas- ne... necesito hacer algo, dejeme pasar.

-¿Que ne...?, ah, ya, ¿esta saliendo mucho?

-Gah- me dejo pasar, pero al dar el paso senti que en liquido no paraba, asi que aprete el trasero.

-Al parecer si, dejame llevarte a tu cuarto para que te asees.

Me levanto como si fuera una pluma, me llevaba como a las novias y yo queria protestar pero dadas las circunstancias no tenia de otra mas que dejarlo hacer eso. Entramos a la que se habia convertido en mi habitación y me dejo en la puerta del baño.

-Me gustaria lavar tu cuerpo, pero sino regreso a la cocina el desayuno se estropeara, si necesitas que te cargue de regreso me avisas.

-Gracias, pero no gracias.

-Como digas- se giro para irse pero lo detuve jalandolo del brazo- ¿que pasa?

-Eto... anho... yo... anoche...- ¿por que diablos no podia hablar bien?- lo de anoche...

-Anoche, fue una de las mejores noches de mi vida- se acerco a mi y me rodeo entre sus brazos quedando cara a cara y nuestros labios a escazos milimetros de distancia.

-La... la mia tambien- cerre los ojos y me escondi en su pecho- pero...

-¿Pero que?

-Pero, ¿que va a pasar ahora?- se tenso al instante y me solto dandome la espalda- ¿Sa... Satoru-san?